Para Franco Cetti, el responsable de la muerte de Rocío Gómez es el instructor que le hizo hacer el bautismo de buceo sin que ella supiera sumergirse sin ayuda.
El ex novio de la argentina muerta en Tailandia culpó al instructor de buceo
Franco Cetti, ex pareja de Rocío Gómez, la turista argentina de 39 años que murió tras sufrir un accidente mientras realizaba el "bautismo" de una instrucción de buceo en la isla Tao, Tailandia, acusó este miércoles al instructor por "negligencia" y lo responsabilizó por lo sucedido.
"Para mí el instructor es negligente porque perdió de vista a Rocío, por eso no la encontraron a tiempo y no pudieron reavivarla", afirmó Cetti a La Nación +.
La ex pareja de Gómez dijo que el instructor, Nahuel Oscar Martino, un argentino de 28 años, "es responsable de que haya desaparecido, porque no la tenía de la mano" al momento de la inmersión.
"A Rocío la perdieron, no se sabe qué pasó abajo del agua ni cuánto tiempo estuvo", aseguró.
Además, indicó que se reunió con la manager de la escuela de buceo tailandesa Pura Vida Koh Tao, que había contratado Rocío, y que ella desligó a Martino de lo sucedido.
"La manager nos dijo que que Rocío se había perdido y que no había seguido el protocolo de seguridad, pero que el instructor siguió 100% los pasos que debía", manifestó.
En tanto, Cetti expresó que la escuela de buceo "no les brindó ayuda en nigún momento".
"Si no hubo negligencia por parte de la empresa, no sé por qué no brinda ayuda", cuestionó.
Además, confirmó que la manager le dijo que Martino lleva "ocho meses" trabajando como instructor.
"No sé lo que pasó. Dicen que le dio un ataque al corazón, que no es culpa del instructor, pero sí es responsable de que haya desaparecido, porque no la tenía de la mano", insistió Cetti.
Mas temprano, Phiyapong Boonkaew, jefe de la Policía de Koh (isla) Tao, indicó que están "investigando las circunstancias" del accidente ocurrido el 17 de diciembre que provocó, cuatro días después, el fallecimiento de la turista.
Fuentes consulares informaron a Télam que Rocío había viajado a Tailandia junto a amigos en diciembre del año pasado. El 17 de ese mes la joven participaba en su primer día de instrucción de buceo, que había contratado con la escuela Pura Vida Koh Tao.