Cuestan unos US$ 3.000 cada una y las adquirirán por licitación. Luego planean llevarlas a otros espacio públicos.
Comprarán pistolas eléctricas para seguridad en trenes y aeropuertos
Patricia Bullrich lo confirmó: decidió avanzar en la implementación de las polémicas pistolas Taser para utilizar, en un principio, en estaciones de trenes y aeropuertos. Se trata de armas que funcionan por descarga eléctrica.
"La idea es hacerlo en lugares de aglomeración donde sólo se puede recurrir al uso de las armas letales en última instancia", informó una fuente de Gobierno a diario Clarín.
No obstante, en caso de que se obtengan buenos resultados, no descartan que en el futuro se utilicen en otros espacios públicos. La implementación de este tipo de arma generó gran controversia el año pasado.
Cabe aclarar que la iniciativa de la ministra cuenta con el aval de Mauricio Macri, que ya había planteado como jefe de Gobierno porteño su intención de poner este tipo de armas para la Policía Metropolitana. Dicha decisión había generado duros cuestionamientos del por entonces gobierno de Cristina Kirchner y de organismos de Derechos Humanos.
Incluso la disputa se judicializó durante varios años, hasta que en 2016 la Corte Suprema de Justicia de la Nación dejó firme un fallo que avalaba la implementación de las denominadas "Taser X 26".
Con el uso de las pistolas taser, Bullrich busca generar un "cambio de paradigma" y demostrar, al igual que con otras iniciativas que propuso en su área, que es una herramienta válida para disuadir focos de violencia y conflicto en lugares de alta concurrencia.
¿Cómo funciona esta pistola? Inmoviliza de forma instantánea a quien recibe la descarga, que genera múltiples contracciones musculares por segundo. Tiene un alcance de hasta 8 metros y, para evitar daños físicos en quien recibe la descarga, los especialistas aconsejan evitar la zona de los ojos.