El tenista suizo viajó a Australia para promocionar un torneo y durante una sesión de fotos fue atacado por el animal.
Los reflejos de Federer lo salvaron del ataque de una langosta
Roger Federer pasó un momento de tensión en medio de una sesión de fotos para promocionar un torneo en Australia.
El tenista suizo fue invitado por la organización de la Copa Hopman. En las afueras de la ciudad de Perth, el deportista de 37 años posó con una langosta gigante y gracias a sus reflejos evitó que el crustáceo lo atacara con sus tenazas.
La situación quedó con una simpática anécdota que afortunadamente no pasó a mayores ya que durante la toma de las imágenes el animal estaba muy inquieto.