Se trata de una deuda de 1200 millones de dólares, impaga desde 2012.
Impsa negocia el pago de una deuda millonaria con Venezuela
La empresa Impsa se encuentra negociando el pago de una deuda con el gobierno de Venezuela, lo cual permitirá reiniciar los trabajos en ese país. Se trata de una deuda de US$ 1200 millones, factor clave para que la empresa entrara en default en 2014, según publicó La Nación.
"Por primera vez hay una mesa de negociación con el gobierno de Venezuela. Fue complejo, pero vamos a ir por etapas, no con toda la deuda junta. Ellos necesitan energía y nosotros, cobrar", expresó Juan Carlos Fernández, CEO de Impsa.
El diálogo está centrado en una represa hidroeléctrica venezolana, Tocoma, en la cual Impsa ganó una licitación para el diseño, fabricación, transporte, montaje y puesta en marcha de 10 generadores Kaplan de 216 MW cada uno en 2012. De las 10 unidades, dos están casi montadas y el resto quedó en Argentina. Según Fernández, esperan poner en marcha las dos turbinas ya listas en Tocoma.
Los negocios con Venezuela son los que llevaron al exdueño de la firma, Enrique Pescarmona, y a su exvicepresidente Rodolfo Valenti a integrar la causa de los cuadernos de las coimas. Ambos están procesados y Pescarmona fue aceptado como "arrepentido".
El empresario reconoció que le dio casi US$3 millones al entonces Ministerio de Planificación "bajo presión", y en su declaración relató los problemas que tuvo la compañía durante el kirchnerismo porque la marginaron de las licitaciones públicas.
En abril de este año la compañía inició una nueva etapa: cambió de composición accionaria y de nombre. Era de la familia Pescarmona, en 2014 entró en default y en los últimos meses completó la reestructuración de un pasivo cercano a los US$1100 millones. Desde entonces, el 65% de las acciones pasaron a manos del Banco Interamericano de Desarrollo, el Banco Nación y bonistas, y la familia solo tiene el 35% de las acciones.