El efectivo, perteneciente a la Federal, estaba vestido de civil y llegaba a su domicilio. Ocurrió en la localidad bonaerense de Rafael Castillo.
Un policía mató a dos ladrones que intentaron robarle la moto
Un agente de la Policía Federal mató a tiros a dos jóvenes que lo asaltaron en la puerta de su casa de la localidad bonaerense de Rafael Castillo con intenciones de robarle la moto, informaron este jueves fuentes policiales.
Tras el hecho, allegados a los jóvenes muertos llegaron al lugar a bordo de dos vehículos -una camioneta y un auto- con intenciones de llevarse los cuerpos, lo que lograron hacer con uno de ellos y que abandonaron más tarde en la puerta de un hospital, añadieron los voceros según la agencia Télam.
El episodio ocurrió anoche en las calles Dávila y Santa Rosa, de esa localidad del partido de La Matanza, cuando el policía de 22 años, vestido de civil y franco de servicio, llegaba a la puerta de su casa a bordo de una moto Motomel blanca y fue sorprendido por los ladrones armados con fines de robo.
Según las fuentes, el agente, quien cumple servicios en Escuela de Cadetes "Comisario General Juan Ángel Pirker", se resistió al robo, se identificó y disparó primero contra uno de los delincuentes con su arma reglamentaria.
El asaltante intentó escapar herido, aunque cayó a unos cien metros, mientras que su cómplice forcejeó con el policía y también fue baleado y murió.
Cuando ambos sospechosos estaban en el suelo, sorpresivamente aparecieron en escena dos vehículos, una camioneta gris y un Renault 19, de los que bajaron personas que quisieron llevarse los cuerpos.
El hombre que bajó de la camioneta no logró su cometido debido a que el policía amagó con dispararle, mientras que los que iban en el Renault consiguieron subir al sujeto baleado al auto y llevárselo, aunque más tarde el cuerpo fue abandonado en la guardia del hospital Paroissien.
Posteriormente arribó a la escena del hecho una ambulancia de la Municipalidad de La Matanza, la cual trasladó al restante herido a una sala de primeros auxilios de la zona, donde ingresó muerto de un balazo en el tórax.
El fallecido fue luego identificado por la policía como Juan Sebastián Ferreyra (22). Ariel Villarroel (18), quien fue dejado en la puerta del Hospital Paroissien, presentaba un balazos en el estómago y otro en el muslo derecho.
La investigación quedó a cargo de la fiscalía especializada en Homicidios Dolosos del Departamento Judicial Matanza.
Por el momento la Justicia no adoptó ninguna mediad para con el policía, ya que se aguardan los resultados de las autopsias y los análisis balísticos de su arma reglamentaria, la cual fue secuestrada.
En la escena del hecho no se encontraron armas de los delincuentes, por lo que la Justicia ordenó realizar un dermotest a los cuerpos de los fallecidos.
Fotos: diario Clarín