El periodista Jamal Khashoggi entró al consulado de Arabia Saudita en Turquía para arreglar unos papeles. Nunca salió.
Caso Khashoggi: el periodista descuartizado en la embajada de Arabia Saudita
Un caso macabro ha sacudido las relaciones internacionales entre Estados Unidos y Arabia Saudita, y amenaza con convertirse en un escándalo diplomático, tras el asesinato y desmembramiento del periodista Jamal Khashoggi, de 59 años y origen saudí, residente en EE.UU. y columnista del Washington Post.
El hecho ocurrió el 2 de octubre a la 1:15 de la tarde, en la embajada de Arabia Saudita en Estambul, cuando Khashoggi entró al consulado para arreglar unos documentos relacionados a su divorcio. Nunca salió. El periodista fue asesinado y descuartizado en las oficinas de la embajada.
El asesinato estaría fundado en motivos políticos. Khashoggi trabajó durante años en embajadas sauditas en Washington y Londres, y hay quienes aseguran que trabajó para el servicio de inteligencia de su país. El periodista llegó a convertirse en un vocero extraoficial de la familia real saudita, que prefería hablar a través de terceros.
La simpatía de Khashoggi por la perspectiva occidental lo convirtió en un individuo importante en su país, bien conectado con periodistas y diplomáticos extranjeros. Sin embargo, el año pasado llegó al poder Mohammed bin Salman, convertido en príncipe heredero el año pasado, con un control sin par en sus manos sobre las palancas del poder dentro del reino.
Jamal Khashoggi fue visto por última vez entrando a la embajada saudita.
Khashoggi decidió exiliarse tras la llegada del nuevo príncipe, por lo cual se mudó a Virginia, Estados Unidos, desde donde actuó como uno de los mayores críticos de Salman desde el occidente.
El fatídico 2 de octubre, el periodista fue a buscar un documento a la embajada de Arabia Saudita en Estambul. Su exilio autoimpuesto había culminado en un divorcio y ahora iba a casarse con una mujer turca, pero necesitaba un certificado por las autoridades sauditas.
Imágenes de cámaras de seguridad lo muestran entrando al consulado, pero ninguna lo muestra saliendo, a pesar que desde el consulado aseguran que Khashoggi se fue por sus propios medios de las oficinas. Su novia, con quien se casaría al día siguiente, lo esperó durante 11 horas a que saliera.
Mohammed bin Salman, príncipe heredero de Arabia Saudita.
Según información de medios de Turquía, el periodista fue drogado, asesinado a golpes y posteriormente descuartizado. El asesinato del periodista duró siete minutos, aseguran, tras lo cual fue desmembrado por el jefe forense de la Dirección General de Seguridad Pública de Arabia Saudita, Saleh al Tubaiqi.
Por su parte, el Washington Post afirmó, citando a oficiales anónimos, que las autoridades de Turquía cuentan con las evidencias de sonido y video de que Khashoggi fue detenido, asesinado y desmembrado, y que evidencian que el periodista fue drogado antes de ser asesinado.
...during the call, and told me that he has already started, and will rapidly expand, a full and complete investigation into this matter. Answers will be forthcoming shortly.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 16 de octubre de 2018
Mientras tanto, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que el príncipe Mohamed de Arabia Saudita "ha negado que tenga cualquier conocimiento" sobre qué sucedió con el periodista y que ha comenzado "una investigación a fondo".
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