Ropa calefaccionada: desde Mendoza para todo el país

El grupo de amigos de Nicolás Molina, Matías Arias, Kevin Schejter y Julián Sánchez comenzó a trabajar en plena pandemia en un proyecto que hoy es único en el país: indumentaria con un sistema de calefacción que integra un conector USB, una batería y un botón para que el usuario elija la temperatura que quiera. Tienen su fábrica en Mendoza y desde aquí venden a gran parte del país y esperan próximamente, a exportar a otros países.

Hoy los cuatro mendocinos integran la empresa Wanderwarm, y ya cuentan con una variada colección de prendas para hombres y mujeres. Chalecos, calzas y camperas son algunas de los artículos que fabrican con este sistema. Además, tienen una línea estética y de diseño de buzos, remeras y gorras.

Ahora que llegó el invierno se entusiasman con seguir creciendo, ya que las prendas las utilizan mucho los deportistas de montaña, esquiadores, ciclistas, trekkers y también muchos motoqueros. "Ellos lo que hacen es conectar el cargador USB a la moto y andan varias horas sin pensar en cargar la batería. Cada vez hay más motociclistas que compran nuestra indumentaria", comenta Nicolás, licenciado en Administración de Negocios y aclara que las prendas son de excelente calidad y diseño, ya que la idea es que sirvan todo el año.

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La primera prenda que fabricaron

El novedoso proyecto surgió de una idea que trajo Kevin desde Estados Unidos, en 2019, donde había ido a esquiar. Este ingeniero industrial, que hoy se encuentra al frente del sector comercial de la empresa, le llamó la atención que en algunos negocios vendías guantes, medias y otros accesorios con un sistema de calefacción. Fue así, que surgió la idea de comenzar junto a sus amigos, el emprendimiento que hoy revoluciona la industria textil en la Argentina.

Tal es así que varios medios nacionales han contactado a los emprendedores mendocinos para conocer los detalles de su propuesta.

El primer producto que lanzaron fue el chaleco Ushuaia, modelo unisex de color negro con el sistema de calefacción. Lo presentaron en agosto de 2020, en plena pandemia, y de a poco fueron sumando más opciones. "Actualmente se sigue comercializando y cuenta con la posibilidad de usarse calefaccionado o no. Tiene una batería portátil, más chica y liviana que un teléfono, y se coloca en un bolsillo interno", explicaron los emprendedores.

En cuanto a las ventas, desde que comenzaron se han duplicado cada año. "El primer año vendimos entre 300 y 400 prendas. En 2021 llegamos a vender más de mil productos y el año pasado contabilizamos dos mil. Este año en toda la temporada tenemos proyectado vender unas 5 mil", detalló Nicolás.

El precio de esta indumentaria especial, ronda siempre alrededor de los 100 dólares el kit de un chaleco con batería incluida, aunque a veces, el precio puede estar un poco más alto que la cotización del dólar.

Cómo funciona

Para entender un poco el sistema los chicos explicaron que dentro de cada prenda se integra el sistema de calefacción, quedando un conector USB y un botón para que el usuario pueda interactuar con el producto.

"El USB sirve para conectarlo a nuestra fuente de energía (un powerbank o un conector USB, se utiliza para conectarlo directamente al conector de las motos), este último alimenta al sistema de calefacción con corriente, y en cada pad se disipa esta energía en forma de calor (los pads tienen un entramado de cobre muy fino por donde circula la corriente). La energía que utilizamos no pone en riesgo al usuario, es muy poca cantidad (5 voltios y 2 amperios)", explicó Kevin.

El botón (switcher) permite regular la temperatura (37 C, 45 C y 55 C). La batería se recarga igual que un celular, y el kit de venta incluye el cable para cargarlo que también sirve para cargar los celulares.