Tomados como "disidentes" las fuerzas de seguridad rusas han detenido a los colaboradores de Navalny quien sigue preso en grave estado y no se le permite ser atendido por sus médicos.
Putin en "guerra" con los manifestantes opositores rusos
"En este momento en toda Rusia están deteniendo a manifestantes. Esto es represión. No se puede aceptar. Tenemos que luchar contra esta oscuridad", denunció el opositor ruso Ruslan Shavedinov.
Ayer, Vladimir Putin ocupaba todas las pantallas dando su gran discurso anual. Y mientras, en la calle, algunos cabecillas de la disidencia eran detenidos en silencio, se cortaba la luz en el canal de la oposición y en algunas universidades sorprendían avisando que a la hora de la manifestación pasarían lista en el aula.
El Ministerio del Interior instó a los rusos a abstenerse de participar en las protestas no autorizadas. Mientras, expertos en derechos humanos de la ONU avisaron que el líder opositor Alexei Navalny está "en serio peligro" y pidieron al gobierno ruso que permitiese que fuese tratado en el extranjero. El político de la oposición está enfermo en prisión: lleva en huelga de hambre tres semanas para exigir tener acceso a sus propios médicos.
Agentes del orden detuvieron a primera hora de la mañana en Moscú a Liubov Sobol y Kira Yarmysh, colaboradores de Navalny. Pocas horas después, en el estudio (situado ahora fuera de Rusia) desde donde emite por internet la plataforma contra la corrupción que capitanea Navalny, sufrieron un misterioso apagón, que les obligó a seguir transmitiendo por Instagram, iluminados con una luz de neón.
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En Moscú la policía selló la céntrica plaza Pushkin, lugar de encuentro de estas manifestaciones. Los poco más de 15.000 manifestantes que se dieron cita solo podían pasear calle arriba la larga avenida Tverskaya. La policía evitó que hubiese cortes de tráfico aunque muchos coches tocaban el claxon sumándose a la protesta. El día, laborable y lluvioso, no ayudó a la capacidad de convocatoria de una disidencia cercada en todos los frentes por unas autoridades rusas que le han declarado la guerra total.
Detenciones en todo el país
Una hora antes de que empezara la gran manifestación en Moscú, 300 personas ya habían sido detenidas en toda Rusia. Al finalizar, ya eran 1.000. En San Petersburgo se difundieron imágenes de un hombre reducido salvajemente por la policía a golpes y con armas eléctricas. Varios periodistas fueron detenidos.
Las primeras marchas del día se llevaron a cabo en el oriente del país. Allí las protestas más nutridas tuvieron lugar en Irkutsk y Novosibirsk, donde unos 4.000 asistentes cantaban "abajo el zar" en la calle sosteniendo las linternas de sus móviles al caer el sol. En Omsk, según informaba la oficina de Navalny en la ciudad, sólo se permitía a la gente entrar a la plaza donde se llevaba a cabo el mitin enseñando un pasaporte, recabando unos datos que podían ser usados en su contra.
En Kemerovo (Siberia occidental) el periodista Andrei Novashov pudo informar de que 23 personas habían sido detenidas en la manifestación. Minutos después, él se convirtió en el detenido número 24 a pesar de estar trabajando como periodista. Su medio, 'Sibir.Realii', ha sido etiquetado como agente extranjero por las autoridades rusas.
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