Este miércoles 7 de septiembre la Ciudad de México se sacudió fuertemente durante la noche, producto de un sismo de 7,1 grados. Además del susto del potente movimiento, a los habitantes de la capital del país azteca los sorprendió que durante el proceso, el cielo se iluminó con luces explosivas e intermitentes.
Las mismas son un fenómeno natural llamado "luces de terremoto", que se forman como consecuencia de la carga electromagnética que provocan las rocas al colapsarse en el movimiento telúrico.
El "EQL", tal como se denomina por sus siglas en inglés, suelen observarse antes o después de un sismo. Se produce por el choque de las capas tectónicas, que generan una onda electromagnética que ionizan el aire y en las nubes chocan con las cargas eléctricas para generar esos destellos.
El dato es que, de acuerdo a los estudios, solo el 0,5% de los sismos que se producen en el mundo generan este fenómeno.
Emanuel Fernández, oriundo de San Luis, reside en Australia y relató este lunes en Radio Post el pánico vivido durante el ataque en Bondi Beach, con corridas, gritos y familias separadas en medio del pánico