Alejo Arias González es de Rivadavia, tiene 24 años y está detenido junto a más de cien personas a mediados de julio y se encuentra incomunicado. La familia dice que él viajó por trabajo y no sabía que era ilegal. Estaba encargado de cobrar a los deudores de la organización.
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El pasado 14 de julio los servicios de seguridad de El Salvador realizaron diversos procedimientos en los que detuvieron a 110 personas, entre ellas un joven argentino, oriundo de Mendoza.
El joven mendocino detenido se llama Alejo Arias González, es del departamento de Rivadavia y desde su detención la familia no ha podido contactarse con él.
Alejo Arias González, detenido en El Salvador.
Mendoza Post dialogó con Sandra González, mamá de Alejo, quien comentó desesperada la situación que atraviesa su hijo en El Salvador. "Alejo viajó a El Salvador hace cuatro meses, en marzo y en septiembre se volvía porque se le vencía el pasaporte. Él se fue con trabajo, a trabajar en una financiera, pero no sabíamos que era ilegal, que operaban en negro", comentó la mamá de Alejo.
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"Alejo trabajaba como cobrador para esta financiera, tenía una ruta designada con más de 100 personas a las que tenía que cobrarles", comentó Sandra, que agregó que se fue "porque tenía una propuesta de trabajo, a él le pagaron los pasajes desde allá y se lo iban descontando de su paga. Eligió irse para allá porque allá la economía está dolarizada y quería hacer algo de dinero para venir a estudiar", explicó González.
El caso de Alejo González se enmarca en una causa muy importante que salió a la luz hace unas semanas. Según consignó el diario Infobae, el pasado 17 de julio, la Justicia salvadoreña anunció la captura de 110 personas vinculadas a la banda de "gota a gota", con 105 detenidos colombianos, un argentino, un guatemalteco y tres salvadoreños.
Esta organización operaba en negro, ofreciendo préstamos no registrados a una tasa del 20%, generando un sistema de usura, en el que si los deudores no pagaban lo que debían, eran amenazados y hasta podían llegar a sufrir usurpación de identidad para acceder a datos bancarios y así transferir el dinero debido a cuentas en el exterior, mayoritariamente a Colombia.
Esta banda realizaba acciones dirigidas a lavar dinero de asociaciones ilícitas provenientes de Colombia y era operada por ciudadanos colombianos que en los últimos años fueron llegando a El Salvador como turistas. Entre ellos, hay militares y policías retirados.
Alejo no tiene contacto con su familia desde mediados de julio.
Luego de proceder con estas detenciones, el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, arremetió en Twitter contra los extranjeros que viajan a El Salvador a delinquir, dándoles a estos "falsos turistas", la oportunidad de huir del país.
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Por el momento no se han registrado avances en la judicialización de los detenidos y la Justicia salvadoreña no ha proporcionado más información
El caso de Alejo Arias González
El joven mendocino, Alejo Arias González, viajó en marzo a El Salvador a trabajar, sin embargo, unos meses después cayó junto la banda colombiana. Sandra, la madre de Alejo, aseguró que su hijo "fue engañado" y que "no sabían que esa financiera era ilegal, si no, no hubiéramos dejado que fuera", explicó la madre.
Alejo aceptó la propuesta de trabajo porque unos primos estaban en dicho país y le comentaron de la posibilidad de trabajar en la misma empresa. Sandra comentó que desde que llegó a El Salvador, a Alejo lo recibieron muy bien, le dieron alojamiento, comida y tenía muchas comodidades que lo hacían sentirse bien
Sin embargo, luego de las detenciones, la madre de Alejo comentó que se enteraron porque "mis sobrinos nos llamaron por teléfono avisando que él no había vuelto a dormir. Luego de eso, el Presidente avisó que los extranjeros tenían algunos días para abandonar el país, entonces se volvieron", comentó Sandra.
La situación que vive la familia es de desesperación de no saber qué pasa con Alejo, porque "está incomunicado, además, el penal al que sería trasladado no recibe visitas, ni aunque vaya el Papa Francisco", aseguró Sandra González.
Alejo es ayudante terapéutico y personal trainer.
"Ellos fueron engañados para hacer ese trabajo, sin saber que estaban envueltos en esta situación", aseguró la mamá de Alejo.
Sandra ha podido comunicarse con la Embajada argentina en El Salvador, pero asegura que no le pueden prestar ninguna asistencia a su hijo, más que hacerle llegar algunos elementos de higiene.
Una de las primas de Alejo, antes de volverse, pudo poner una abogada para el caso de Alejo, "pero nada pudo hacer por Alejo. Creemos que el juez no vio caso por caso de cada detenido. Los detenidos no tienen una sentencia, están en un proceso que puede durar de 6 meses a 1 año, pero no sabemos qué puede pasar", comentó angustiada la madre de Alejo. "Esperamos que puedan dar con los cabecillas de la banda, porque eso puede agilizar las cosas", se esperanzó Sandra.
Piden que el Gobierno los ayude a destrabar la situación judicial de Alejo, dado que hasta el momento no han obtenido respuestas. "Pedimos que puedan hacer que revean el caso de Alejo en particular, pero no dentro de seis meses, ahora, lo más rápido posible. Algo nos dijeron que allá (en El Salvador), los jueces entran en vacaciones o feria, pero esperamos que se puedan agilizar la situación", declaró González y añadió que "no tuvo ni siquiera la posibilidad de defenderse, de alegar ni de explicar la situación. Queremos justicia para Alejo, porque estamos seguros que está pasando por una situación muy injusta", concluyó Sandra González, la madre de Alejo Arias González.
