Castigan a congresista por alentar teorías conspirativas

La Cámara de Representantes de Estados Unidos removió este jueves de sus cargos en comisiones del cuerpo a la legisladora republicana Marjorie Taylor Greene, aliada del expresidente Donald Trump, por alentar teorías conspirativas.

La congresista fue apartada de sus funciones en las comisiones de Educación y de Presupuesto con 230 votos a favor y 199 en contra, según las agencias de noticias AFP y Sputnik.

De 46 años y electa diputada por el estado sureño Georgia en los comicios del 3 de noviembre pasado, Taylor Greene comparte las ideas del movimiento QAnon, que promueve diversas teorías conspirativas.

Entre esas teorías suscriptas por la parlamentaria figura la que sostiene que Trump luchaba contra una red de pedófilos adoradores del Diablo, que supuestamente funciona en el Partido Demócrata y el sistema político estadounidense en general.

Asimismo, sostuvo teorías conspirativas sobre los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, los frecuentes tiroteos en escuelas y el gran incendio forestal ocurrido en California en 2018, que según esa corriente fue financiado por parte de la comunidad judía.

Taylor Greene también acosó en la calle a sobrevivientes de la masacre en una escuela secundaria en Parkland, sucedida en 2018, luego convertidos en activistas contra el uso de armas, según videos que circularon por redes sociales.

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Poco antes de las elecciones de noviembre, Facebook eliminó un video en el que Taylor Greene sostenía un fusil y advertía a los "terroristas antifa" (antifascistas) que se mantuvieran "alejados del noroeste de Georgia".

Además, acusó a la presidenta demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, de ser culpable de "traición", un delito que, según ella, es "castigable con la muerte".

Recientemente, la legisladora se mostró arrepentida de haber sostenido esa clase de opiniones.

El líder de la bancada republicana en la cámara baja, Kevin McCarthy, afirmó ayer que Taylor Greene había causado "profundas heridas" a mucha gente y había pedido disculpas, pero rechazó la posibilidad de expulsarla de las comisiones bajo el argumento de que esa medida era una "maniobra de poder" de los demócratas.