El juez argentino, que tramita denuncias contra el régimen de Ortega por delitos de lesa humanidad, emitió un fallo histórico basado en el principio de "jurisdicción universal".
Lijo pidió la captura internacional del dictador nicaragüense Daniel Ortega
En un fallo sin precedentes, el juez federal argentino Ariel Lijo ordenó la declaración indagatoria y la captura internacional del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y de su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo. Ambos están acusados de graves violaciones a los derechos humanos en el marco de una causa presentada bajo el principio de jurisdicción universal.
La denuncia fue impulsada por el abogado Darío Richarte junto a un equipo de profesores y estudiantes de la Universidad de Buenos Aires. Según el expediente, Ortega y Murillo, junto con otros altos funcionarios de su régimen, habrían cometido crímenes de lesa humanidad, incluyendo asesinatos, desapariciones forzadas, torturas y persecución política desde abril de 2018.
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Ortega ocupa el poder desde el año 2006
Un "hecho histórico" en la justicia internacional
Richarte calificó la resolución como un "hecho histórico" y subrayó que constituye un avance significativo en materia de justicia universal. "Este fallo visibiliza la situación en Nicaragua y sienta las bases para buscar justicia para las víctimas", afirmó. La causa fue respaldada por testimonios directos de víctimas, informes de organismos internacionales y una vasta documentación presentada por los denunciantes.
La denuncia original fue presentada en agosto de 2022 y ampliada en siete ocasiones entre 2022 y 2024. A lo largo de más de dos años, el equipo denunciante recopiló pruebas en colaboración con organizaciones internacionales y otros actores clave en la defensa de los derechos humanos.
El caso se sustenta en el principio de jurisdicción universal, que permite a los tribunales argentinos juzgar delitos graves como los crímenes de lesa humanidad, independientemente del lugar donde hayan sido cometidos. Esta postura fue avalada por el fiscal Eduardo Taiano y confirmada por el juez Lijo, marcando un precedente en la justicia penal internacional.
El pedido de captura internacional contra Ortega y Murillo representa un desafío diplomático para el régimen nicaragüense, que ya enfrenta múltiples sanciones y condenas internacionales. Según Richarte, el fallo busca aislar a los dictadores y comprometer a la comunidad internacional en la defensa de la democracia.
Protestas en Nicaragua por las violaciones a los DDHH
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