Karl Nehammer realizó las polémicas declaraciones en un congreso del Partido Popular Austriaco donde se trataron los niveles inflacionarios que sufre Europa.
Con 8% de inflación en Austria temen que la gente se vuelva alcohólica
El canciller de Austria di una serie de extraños conejos para combatir la crisis inflacionaria en la Unión Europea. Para Karl Nehammer, si los precios continúan aumentando como lo han hecho en los últimos meses, las únicas opciones que tendrá la gente será consumir alcohol y psicofármacos. Durante junio la inflación interanual europea fue de un 8,6%.
Para los habitantes del viejo continente este nivel de inflación resulta alarmante y afecta a los bolsillos de los consumidores. Por esto Nehammer en un congreso del Partido Popular Austríaco comentó que la si la situación se mantiene, los austriacos solo tendrán estas dos opciones.
La economía de Europa viene reportando datos en rojo desde noviembre del año pasado y esto continua aumentando. Sobre todo en torno a los costos energéticos que han subido abruptamente. Nehammer planteó la posibilidad de establecer medidas para reprimir la inflación por parte de todo el continente.
Luego aprovechó para bromear sobre sus comentarios anteriores diciendo que el alcohol estaba bien para consumir, "lo decisivo es que siempre brindes cuando te sientas bien", concluyó.
Ver: Explotó el propulsor de la nave que Elon Musk quiere llevar a Marte
Situación Europea y la influencia de la guerra rusa
La inflación de los países de la Unión Europea alcanzó un récord con un 8,1% interanual en mayo. Esta suba se dio por el crecimiento de los costos energéticos provocados en buena medida por el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania. Recordemos que estos son grandes exportadores de varias energías, sobre todo de gas.
Los precios de la energía subieron un 39,2%, dejando en claro cómo afecta el conflicto bélico al resto del continente. Esto no fue lo único que subió, los alimentos subieron un 7,5% según Eurostat. Además la ropa, electrodomésticos, automóviles tecnología y libros subieron un 4,2%. Estos niveles de inflación no se registraban desde 1997, año en que se instauró el uso del euro.
Ver: Pánico en Nueva York con un video sobre cómo sobrevivir a un ataque nuclear