Producen 400 mil bolitas por día. La historia de una empresa que sobrevive pese a la tecnología y los cambios en las costumbres de juego.
Tinka, la fábrica de bolitas que es única en Sudamérica
Las bolitas fueron uno de los juguetes más importantes de la infancia de toda una generación. En un mundo de pantallas y computadoras que caben en un bolsillo, estos simpáticos objetos pueden parecer anticuados, pero en Argentina hay una fábrica que sigue manteniendo viva la tradición. Es la única que fabrica bolitas en Sudamérica y produce nada menos que 400 mil por día.
Las bolitas -o canicas, como se las conoce en otras partes del mundo- se producen hace 70 años en la fábrica Tinka, dirigida en un principio por dos hermanos santafesinos en la localidad de San Jorge, que cuenta 24 mil habitantes. Hoy en día, quienes están a cargo de la compañía son las tres hijas de uno de ellos: Rosana, Silvia y Mariana Chiarlo.
Empresa familiar y orgullo de San Jorge, la otra gran peculiaridad de Tinka es que es única en su tipo en toda América del Sur. Para conseguir otra fábrica de bolitas, hay que irse a México o cruzar el océano hasta China.
"Fue como una utopía de mi familia. Era un producto que no existía al menos en el país. Mi tío creyó en ese proyecto y lo llevó adelante con mucho esfuerzo y trabajo", relató Rosana al sitio Infobae.
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Tinka produce varios tipos de bolitas: Vergel, la transparente con color por fuera; la Onix, que es totalmente negra; la Pétalos, que es la que parece un ojo de gato; y la Aerosol, la más común, que lleva en su interior aerosoles de pinturas o espumas de carnaval. Se fabrican tanto bolitas de 16 milímetros como los bolones de 25 milímetros.
Hoy en día, Tinka fabrica unas 400 mil bolitas diarias a través de un horno que está prendido prácticamente toda la semana y tiene una temperatura de 1.600 grados.
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