El secreto para que dé mejores frutos está en realizar un injerto, una técnica que consiste en trasplantarle una yema de otro árbol. Cómo hacerla.
Cómo acelerar el crecimiento de un limonero
Una manera de lograr que una planta se reproduzca artificialmente es realizar un injerto. Esta técnica es compleja pero siguiendo algunos consejos, cualquier persona puede llevarla a cabo de forma exitosa. El resultado será un crecimiento más veloz y mejores frutos.
El limonero es un árbol cuya yema es bastante sensible, por lo que hay que tener ciertos cuidados a la hora de realizar la técnica del injerto. Por eso, es conveniente tener en cuenta algunas recomendaciones antes de encarar la tarea. La primera es disponer de herramientas esterilizadas: tendrán contacto directo con la planta y deben estar limpias de toda contaminación.
La otra recomendación es previa: hay que elegir bien la época del año para hacerlo. En concreto, la primavera es la más adecuada ya que la savia está bien activa en ese momento. Así como se elige la estación, hay que escoger una rama saludable del limonero. Es decir, que no tenga manchas o plagas.
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Ya estamos listos. Entonces, deberemos limpiar el porta injerto. Esto significa despejar el tronco de hojas y espinas, dejando al menos 20 o 30 centímetros de altura por encima del injerto de la yema. De esta forma, tendrá espacio para crecer.
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Donde vayamos a colocar el injerto, deberemos hacer un corte en T. Entonces, levantaremos la corteza en los dos lados que se abren en el corte vertical, preparando el espacio para introducir la yema.
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A continuación, sacar una yema de un buen limonero, uno que tenga buenas frutas. Cortar un rectángulo chico que entre en la "T" cortada anteriormente.
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Cuidando de no tocar la yema por el lado de la savia, introducir esa parte en el injerto. La yema debe quedar mirando hacia arriba para crecer de forma natural. Con una cinta de injerto, pasarlo alrededor del mismo sin tocar la yema para que quede reforzado.
Dejar la planta a la sombra por dos semanas para que se recupere y luego exponerl aa la luz del sol. Antes de dejarla al aire libre, retirar la cinta de injerto. La yema debe estar verde.