Debemos ser especialmente cuidadosos con nuestro vehículo y el calor, ya que las altas temperaturas pueden afectar su funcionamiento.
Tips para cuidar tu auto durante los días de intenso calor
Cuidar nuestro vehículo del calor extremo es crucial para mantener su rendimiento, durabilidad y seguridad. Algunos de los problemas más comunes son el sobrecalentamiento del motor que puede causar daños irreversibles, como así también el deterioro de los fluidos como el aceite y el líquido de frenos o los fallos en el sistema de transmisión que suelen acarrear inconvenientes difíciles de solucionar.
Frente a los días de extremo calor, está claro que la primera recomendación siempre será estacionar nuestro auto bajo una sombra natural o utilizar un toldo que logre cubrirlo por completo. Sin embargo, diversos especialistas, comparten algunos tips más específicos sobre cómo cuidar a nuestro vehículo de los calores ampliando información importante al respecto.
6 tips básicos para cuidar nuestro auto del calor:
1) Protección para el interior: La función del parasol es clave, ya que la mayoría de los rayos del sol llegan a través del parabrisas. También es recomendable utilizar un protector para el volante y tener cuidado con los enganches metálicos de los cinturones. Si nuestro auto quedó estacionado al sol, seguramente la temperatura al interior se encuentre muy elevada, ya que el vehículo actúa como un horno y no deja escapar el calor, seguir los consejos mencionados puede ayudar a disminuir el impacto de las altas temperaturas.
2) Limpieza: Lavar el coche de forma regular también ayuda bastante a combatir los efectos del calor intenso. De esta forma se consigue refrescar la carrocería y las altas temperaturas afectarán en menor medida. Es recomendable evitar las horas centrales del día para el lavado, esto es porque con la exposición al sol y mucho calor, el agua se evapora más rápido.
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3) Protección para la mecánica: Si ni bien nos subimos al auto el calor es insoportable, hay que evitar la tentación de poner el aire acondicionado a tope en el momento del arranque para no sobrecargar ese sistema de refrigeración que comienza a funcionar. Al principio es mejor bajar las ventanillas y dejar que el vehículo vaya alimentándose para luego poner el aire y que enfríe correctamente.
4) Neumáticos y frenos: Si bien siempre es importante su control, en días de calor esto es fundamental. De las gomas hay que ver que no estén desgastadas y que su presión sea correcta. Con una presión baja la banda de rodadura se calentará más todavía y podríamos sufrir un pinchazo. Por otro lado, el funcionamiento de los frenos consiste en esas pastillas que rozan con el disco para ir deteniendo el vehículo. Esta acción ya genera mucho calor en sí misma y en días de calor aumenta mucho más por lo tanto, se pueden dar sobrecalentamiento en los frenos, llegando a extremos como la deformación de los discos.
5) No te olvides del motor: Es importante verificar el indicador de temperatura del motor de tu auto, que regularmente se encuentra a un lado del indicador de combustible. El problema viene cuando el indicador de temperatura llega a la zona roja, ya que el motor corre el riesgo de quemarse. Si notas esto, lo que se recomienda es llevar el auto al taller para que pueda ser revisado en detalle.
6) La carrocería también es importante: Al igual que nuestra piel, la carrocería de nuestro vehículo también necesita cuidados frente al calor extremo. Con el tiempo, la pintura acaba perdiendo su brillo y los plásticos exteriores y retrovisores, entre otros objetos, se van decolorando al quedar expuestos por largos periodos al sol. Lo mismo sucede con las juntas de las puertas y las gomas de los limpiaparabrisas. En este sentido, se recomienda incorporar una cera protectora contra los rayos ultravioletas para cuidar la carrocería.
Además de aplicar los consejos mencionados, los especialistas también recomiendan siempre tener a mano el manual del fabricante de nuestro auto. Esto nos permitirá conocer las recomendaciones oficiales más específicas para cada vehículo como así también, realizar inspecciones regulares a mecánicos profesionales para prevenir problemas más graves.
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