Técnicas de ahumado en casa: cómo dar un toque gourmet a tus platos

El ahumado es una técnica culinaria que transforma sabores y aromas, llevándolos a otro nivel. Conocé cómo replicar este proceso en tu cocina, sin la necesidad de contar con equipos sofisticados.

Técnicas de ahumado en casa: cómo dar un toque gourmet a tus platos

Por: Facundo Correa

El ahumado, es una de las técnicas más antiguas de preservación y realce del sabor, utilizada por diferentes culturas desde tiempos inmemoriales. Hoy en día, este principio de cocción ya no se limita a métodos tradicionales o a cocinas profesionales, ya que ahora podés incorporarlo a tus platos desde la comodidad de tu hogar. 

El encanto del sabor ahumado radica en su capacidad para aportar profundidad y complejidad a una amplia variedad de alimentos, desde carnes y pescados hasta vegetales y quesos. Pero, más allá del sabor, el ahumado tiene un carácter evocador: remite a fogatas, bosques y momentos de conexión con la naturaleza, elevando cualquier plato cotidiano a una experiencia gourmet. 

Para poder realizarlo en casa, no vas a necesitar equipos complejos ni grandes espacios. Con algunos utensilios básicos y las técnicas adecuadas, sin lugar a dudas vas a sorprender a tus comensales con sabores únicos que parecerán salidos de un restaurante de la alta cocina.

Según especialistas en cocina, estos son algunos beneficios de los alimentos ahumados:

Sabor único: ahumar los alimentos les otorga un sabor muy concreto, intenso, especialmente atractivo para muchos paladares

Conservación: la técnica del ahumado alarga la vida útil del producto y preserva su calidad, ya que elimina la humedad e inhibe la acción de las bacterias.

Valor nutritivo: el ahumado mantiene los nutrientes y proteínas de los alimentos.

Eliminación de bacterias: este proceso combate el crecimiento bacteriano y previene enfermedades transmitidas por determinados alimentos.

Bajo contenido en grasas: reduce la grasa propia del alimento y no requiere grasas extra para su preparación.

3 técnicas para ahumar en casa

1. Ahumado en sartén o wok: Una técnica simple que utiliza virutas de madera, papel aluminio y una sartén con tapa. Ideal para carnes, pescados o vegetales.

El ahumado en sartén o wok es ideal para carnes o vegetales

2. Ahumado en horno: Perfecto para quienes tienen un horno convencional; solo necesitas una bandeja para las virutas y ajustar la temperatura para permitir que el humo impregne los alimentos.

El ahumado en horno permite impregnar mejor los alimentos

3. Ahumado líquido: Una opción rápida y accesible para quienes buscan un toque ahumado sin complicaciones, añadiendo unas gotas a marinados o salsas.

El humo líquido es una opción de ahumado rápida y sencilla

Receta: Salmón ahumado en sartén

Ingredientes:  

. 2 filetes de salmón fresco

.1/2 taza de azúcar moreno

. 1/2 taza de sal gruesa

. 1/2 taza de virutas de madera para ahumar (manzano o cerezo, idealmente)

. Papel aluminio 

. Aceite de oliva

El salmón ahumado, un plato clásico de la gastronomía

Preparación:

Paso 1: Mezclar el azúcar con la sal gruesa, y cubrir los filetes de salmón con esta mezcla. Dejar que repose en la heladera durante 30 minutos para que el pescado tome sabor y pierda algo de humedad. Luego, enjuagar los filetes con agua fría y secarlos con papel de cocina.

Paso 2:  Forrar el fondo de una sartén profunda o wok con papel aluminio y colocar las virutas de madera en el centro. Cubrir las virutas con otra capa de papel aluminio perforado para evitar que entren en contacto directo con el pescado.

Paso 3: Colocar el salmón sobre una rejilla o base elevada dentro de la sartén, asegurándote de que no toque las virutas. Tapar bien la sartén con su tapa o más papel aluminio para evitar que el humo se escape. Cocinar a fuego medio-alto durante 10-15 minutos, dependiendo del grosor del filete

Paso 4:  Retirar el salmón del ahumador, pintarlo con un poco de aceite de oliva y servirlo caliente o frío, acompañado de ensalada, arroz o pan tostado.

Tip extra: Este método también funciona con otros pescados, tofu o incluso vegetales como berenjenas o pimientos. ¡Experimentá! 







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