De manera muy sencilla armá algo muy saludable.
Cómo preparar una tarta salada de cebolla, queso y con mucho sabor
Las tartas presentan la posibilidad de rellenarlas con todo tipo de productos. La innovación está en la mano del cocinero o de la cocinera que se anime a sorprender a todos con el toque particular que tenga.
Teniendo en cuenta la gran variedad de rellenos, la tarta puede significar una nueva comida de primera calidad y con ingredientes "reciclados" de alguna otra comida. Por esto mismo, hay de varios tipos, de jamón y queso, de verdura, de legumbres, de atún y de lo que te imaginés.
En esta oportunidad, te traemos una receta muy fácil de hacer y que ya es un clásico para los argentinos. Se trata de la tarta salada de cebolla y queso, la cual podrás lograr con muy pocos ingredientes y una sencilla preparación.
Ingredientes
Para 6 personas
Cebolla 3
Queso manchego 150 g
Huevo 3
Leche evaporada 175 ml
Ver: Escones sin queso, fáciles de hacer y en pocos minutos
Masa quebrada redonda 1
Mostaza de Dijon (opcional) 5 g
Sal, Pimienta negra molida
Aceite de oliva virgen extra 25 ml
Preparación
Pelamos y picamos las cebollas lo más finas posible. Calentamos el aceite en una sartén y pochamos a fuego muy suave durante un mínimo de 20 minutos. Retiramos cuando esté translúcida y pálida (no la dejes dorar). Dejamos enfriar.
Cubrimos la base y laterales de un molde desmoldable de 22 cm con la masa quebrada. Colocamos papel vegetal por encima y rellenamos con algo de peso, nosotros tenemos unos garbanzos que usamos solo para este cometido. Cocemos en la parte baja del horno, precalentado a 190 ºC con calor arriba y abajo, durante 20 minutos. Retiramos y reservamos.
Batimos los huevos con unas varillas hasta que doblen su volúmen. Añadimos la leche evaporada, salpimentamos al gusto y removemos suavemente. Incorporamos la cebolla pochada y el queso manchego rallado. Mezclamos con cuidado.
Ver: Cómo preparar galletas sin gluten con 4 ingredientes
Extendemos una fina capa de mostaza (opcional) sobre la masa quebrada cocida y rellenamos con la mezcla anterior. Introducimos de nuevo en el horno, precalentado a 190 ºC con calor arriba y abajo, y cocemos 30 minutos. Dejamos reposar la tarta unos 60 minutos antes de servir para que se asiente un poco y no se desmorone al cortar.