El truco más sencillo para evitar que tus cosas estén secándose de un día para el otro.
Cómo secar el escurridor de tus utensilios lo más rápido posible
Lavar los platos después de comer es una tarea que no a muchos les gusta. Pero secarlos, mucho menos. Es por eso que el escurridor de la cocina se convierte en el mágico aliado.
Sin embargo, hay veces en las que necesitás usar ese utensilio que está ahí, aún escurriéndose. No existe un producto milagroso, pero sí un truco que te va a servir de gran ayuda.
Estos tips, propuestos por el sitio Gastrolab Web, son muy sencillos y evitarán que tengas que esperar a que tus cosas se sequen de un día para el otro.
La manera más rápida
Es una solución práctica, rápida y efectiva: tomá una toalla de cocina completamente seca y pasarla por la superficie del utensilio en cuestión, especialmente en donde tiene más agua.
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Esta sencilla técnica se puede utilizar con todos tus utensilios y en cualquier momento.
Para que los otros platos no queden húmedos, dejá reposar la toalla un rato: si la usás mojada, puede generar mal olor. Por eso conviene ir secando "de a tandas".
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También se pueden usar las esponjas (nuevas) para quitar los excesos de agua, aunque tardan mucho más y acumulan mayor humedad.
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