Nuestro organismo puede darnos varios indicios de que algún desequilibrio hormonal se esté produciendo.
Una a una, las señales de que podrías tener un problema de tiroides
Hablar de problemas de tiroides es fundamental porque son numerosas las personas que podrían estar padeciendo esta situación sin percibir las señales. Específicamente, las enfermedades de las tiroides afectan más a mujeres que a hombres. De hecho, durante períodos de cambios hormonales, como el embarazo y la menopausia, tienen más riesgo de desarrollarlas, según la Oficina para la Salud de la Mujer de Estados Unidos.
Vale mencionar que la glándula tiroides (también llamada simplemente tiroides) está ubicada en la parte frontal del cuello. Su forma se asemeja a la de una mariposa con un ala en cada lado del cuello y cumple varias funciones importantes para mantener al organismo sano. Se trata de una glándula endocrina,que controla muchas de las actividades de tu cuerpo, ya que permite controlar el metabolismo, desde la temperatura corporal, frecuencia cardíaca y la velocidad con la que quemas calorías.
Las enfermedades de la tiroides afectan más a mujeres que a hombres.
Pero, si su funcionamiento no es el correcto, es común que estas enfermedades aparezcan como trastornos autoinmunes, pero también ocurren por fallas en la producción de la misma glándula.
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¿Cuáles son los síntomas?
Cuando las tiroides no funcionan correctamente se presentan complicaciones específicas que podrían estar tratando de ponernos en alerta. Uno de los signos puede estar relacionado con el período menstrual, afectando la manera en que se presente siendo más escaso, prolongado o irregular, dependiendo de la cantidad de hormona tiroidea que se produzca.
Además, podría hacer más difícil el quedar embarazada, o causar problemas durante el período de gestación tanto al bebé como a la madre. Pero con los chequeos regulares, se pueden identificar estos diagnósticos rápidamente.
Los síntomas que hay que tener en cuenta.
Pero, también es importante mencionar que los síntomas de la tiroides varían mucho dependiendo de la enfermedad que se trate; de hecho, entre hipotiroidismo e hipertiroidismo son completamente contrarios.
Por ejemplo, con una tiroides hiperactiva podrías experimentar ansiedad o irritabilidad, pérdida de peso involuntaria, problemas para dormir, debilidad muscular, inflamación de la tiroides, intolerancia al calor o un ciclo menstrual más irregular. Mientras que con el hipotiroidismo parte de la sintomatología habitual son el cansancio, aumento de peso, el cabello seco, la voz rasposa y ciclos menstruales más abundantes.
Fuente: Meganoticias.
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