Lo mejor de éste método es que no demanda ingredientes sofisticados, ni tampoco un gran esfuerzo. Lo mejor: no es mito. Es realidad.
Truco probado: Cómo sacar el sarro de la grifería
El sarro es una sustancia compuesta por distintos elementos que contiene el agua, entre minerales y magnesio, lo que comienza a concentrarse en cañerías y grifería. Por lo que existen empresas que comercializan purificadores o ablandadores, de lo que se denomina "agua dura" .
Y tanto pasa el sarro por las canillas que llega el momento que se "apoderan de ellas". Se puede intentar con productos de los cientos que hay en el súper, con cepillo o estropajo en mano, o empezar a buscar otra vía cuando ya empezamos a notar que tomó la grifería a modo "alien".
Entonces aparecen las recomendaciones de bicarbonato de sodio y agua aplicado con cepillo de dientes; tallar o restregar con limpiador en pasta blanco; vinagre, limón y bicarbonato juntos. Hasta que habiendo probado todo, el sarro no despega. Entonces vamos por la opción de toda la noche. ¡Y esa funciona!
La primera prueba fue sencilla, al poder quitar de la ducha. El método a usar era el más sencillo y único: vinagre de manzana. Algunos posteos recomiendan mitad de agua y mitad de vinagre. Pero para este caso, de sarro extremo, la prueba fue sin mezcla.
El paso a paso fue dando la verificación. Sólo dejé apoyado el rociador en el vinagre de un día para otro. Durante las primeras horas comenzó a transformar el sarro en algo más transparente, como si fuera azúcar húmeda.
Luego, sin fregar, sin tocar, sin raspar, sólo dejándolo apoyado en el líquido se fue desprendiendo. A la mañana siguiente estaba totalmente desprendido, sin daño, sin pérdida de color y con un exceso de brillo.
La opción para las canillas o grifos que no se puede retirar es ajustar con un elástico una bolsa que contenga el líquido. Esta opción pasó el examen. Habría que ver si la que indica que usando bicarbonato, junto al vinagre, desprende el sarro con mayor rapidez.