Esta tarta sin TACC es muy sencilla de preparar. Solo necesitarás fécula de mandioca.
Cómo hacer una tarta de queso apta para celíacos
Una de las comidas más comunes, especialmente para las personas que viven solas, es la tarta. La enorme variedad de ingredientes que puede tener esta comida la hace muy versátil y permite "salvar" esos días en los que nos cuesta mucho pensar en una opción para preparar. Pero no todos pueden comerla.
Las personas con celiaquía tienen que resignar muchas comidas debido a su condición. Pero a no desesperar: existen recetas de tartas sin TACC (trigo, avena, cebada y centeno) que son igual de ricas que la preparación tradicional. De esta manera, los celíacos podrán disfrutar de una riquísima tarta al igual que cualquier otra persona.
En esta ocasión, la receta que dejaremos es una de tarta de queso sin TACC. Los ingredientes que necesitamos para la masa son 4 cucharadas de semita de maíz, 4 cucharadas de fécula de mandioca, 10 cucharadas de almidón de maíz, 120 gramos de manteca, 1 cucharadita de sal y media taza de agua.
Versión de la tarta con tomates en la parte superior.
Para el relleno utilizaremos 3 huevos, 20 cc de crema de leche, 1 cucharada de mostaza, media cucharadita de nuez moscada, 150 gramos de queso gruyere, sal y pimienta
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La receta
Lo primero que haremos será mezclar en un recipiente o bol los ingredientes secos. Entonces, haciendo un agujero en el centro, poner la manteca cortada en cubos y la sal.
La masa de esta tarta sin TACC lleva fécula de mandioca.
En segundo lugar, con la punta de los dedos, hacer un arenado en la mezcla e ir incorporando de a poco el agua. Luego, formar un bollo y dejar la masa reposando por tres horas en un lugar tibio.
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Posteriormente, estirarla (con manos o palo de amasar) y forrar una tartera de 24 centímetros. Llevarla 10 minutos a horno moderado, sacarla y guardar.
Ahora nos queda el relleno. Batir apenas los huevos con la mostaza, la crema y los condimentos. Volcar el queso rallado bien distribuid0 sobre la masa y por encima, los huevos. Hornear a fuego moderado por media hora o hasta que el relleno cuaje y la superficie esté dorada.
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