Creemos que estamos siendo más productivos, incluso puede ser una ayuda a la autoestima, pero lo cierto es que puede derivar en todo el contrario.
¿Qué es el síndrome de las ventanas abiertas?
Trabajar desde casa tiene aspectos positivos y negativos que trajo la pandemia.
Y si bien esta manera de trabajar tiene ventajas, también tiene sus riesgos. Uno de ellos es conocido como "síndrome de las ventanas abiertas", que ha cobrado relevancia en estos últimos meses.
¿De qué se trata?
El síndrome de las ventanas abiertas se trata de un comportamiento que consiste en mantener decenas de ventanas en nuestra computadora abiertas e ir saltando de una a otra, pero sin concentrarse bien en ninguna.
Muchas personas creen que la productividad en el trabajo está relacionada con el número de ventanas abiertas, pero incluso puede provocar que seamos más lentos, por lo que termina influyendo en la productividad.
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Al hacer demasiadas cosas a la vez, podemos pensar que estamos incrementando el rendimiento laboral y puede ser incluso un impulso, pero realmente somos menos productivos.
¿Cómo evitarlo?
La primera gran herramienta es la planificación diaria, semanal o mensual. Los expertos recomiendan trabajar en bloques, esto es, no mezclar tareas diferentes e ir paso a paso por cada una hasta terminarla, para evitar distracciones.
Otra cuestión importante es, dentro del plan diario, establecer un horario para no excederse en la jornada laboral al trabajar desde casa. Pero a la vez, fijar un plazo para la ejecución de estas tareas y objetivos.
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