Es normal que los perros entierren o guarden comida, pero hay que estar atentos a las razones que llevan a esa conducta.
¿Por qué tu perro esconde la comida?
Los perros son de las mascotas más elegidas para que nos cuidemos mutuamente. Sin embargo, a pesar de convivir a diario con ellos, hay muchas incógnitas sobre los hábitos de su alimentación que aún desconocemos.
Es necesario conocer cuestiones acerca de sus conductas en lo que tiene que ver a esta alimentación, por ejemplo... ¿Por qué tu perro esconde comida por la casa?
Hay varias razones por las que cuales suelen esconder la comida. En principio, en la mayoría de los casos responde a un patrón de conducta normal vinculado a la supervivencia.
En primer lugar, puede ocurrir que tu perro sienta necesidad de "proteger" su comida. Principalmente, de asegurarse de que otros animales de la casa no se coman lo que le pertenece. Puede ocurrir que el perro intente comerse muy rápido su comida o la guarde porque otras mascotas del hogar no estén saciadas con su comida y traten de comerse la suya.
En segundo lugar, puede que tu perro únicamente se guarde aquellos "snacks" o "premios" que le das y le encantan, es decir, que este comportamiento se vincule únicamente a situaciones concretas o alimentos concretos.
Los alimentos que no deben comer los perros
También puede ocurrir que el entorno en el que el perro come no le resulta lo suficientemente cómodo o confortable. En este sentido, es importante encontrar un sitio que no sea ruidoso, ni muy transitado y de la misma forma, que no esté aislado. Al igual que es necesario determinar si a tu perro le gusta comer acompañado o en soledad.
Además, debes barajar la posibilidad de que tu perro no esté comiendo lo suficiente. Lo que ocurre por lo tanto es que al no comer suficiente, pasa hambre y necesita dosificarla durante el día, motivo por el cual la esconde.
También puede ser que el perro haya pasado por experiencias pasadas en las que haya pasado hambre, si es que lo adoptaste de la calle o de algún refugio.
Finalmente, dos razones muy posibles son porque quiere jugar o se aburre. En este caso, tenemos que intentar darle juguetes para que pueda jugar y estimularlo lo suficiente para que no quiera jugar con la comida.