Trucos sencillos y con productos que tenés en casa para que las dejes relucientes.
Cómo eliminar manchas de té o café del fondo de la taza
Es normal que con el paso del tiempo y el uso frecuente, las tazas comiencen a acumular manchas de café o de té. Sobre todo porque no siempre las lavamos de manera inmediata, sino que las dejamos "para después".
Esto hace que se vayan formando manchas en el fondo y que quitarlas - al igual que el olor - se vuelva cada vez más complicado.
De todas maneras, esto no significa que tenés que tirarlas y salir a comprar nuevas, ya que existen trucos sencillos para limpiar las tazas y dejarlas como nuevas.
Lo más sencillo para limpiar tus tazas de cerámica o porcelana es hacerlo utilizando bicarbonato de sodio, señala el sitio La Mansión de las Ideas.
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Solo necesitás un poco de bicarbonato, una esponja con estropajo verde y agua:
-Formá una pasta espesa con dos cucharadas de bicarbonato y una de agua;
-Impregná la esponja con esta mezcla y frotá con fuerza en el interior de la taza. Vas a notar cómo las manchas van saliendo;
-Por último, enjuagá con agua tibia y secá. Vas a ver que las manchas desaparecen y el fondo de tu taza queda reluciente.
Otra opción - si querés obtener resultados más rápido - es reemplazar el agua con vinagre blanco o jugo de limón.
También se puede limpiar las tazas con sal y limón: tres cucharadas de sal y el jugo de tres limones. Colocá la mezcla en la taza y dejá actuar por 10 minutos. Refregá con la esponja o con las mismas cáscaras del limón y lavá con abundante agua tibia.
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Las tazas sucias se pueden limpiar además llenando hasta la mitad con vinagre blanco y agregando 3 cucharadas de bicarbonato; mezclá y dejá reposar por 30 minutos. Refregá y enjuagá con agua, sobre todo para sacar el olor a vinagre.
Y si en casa no tenés ninguno de estos ingredientes, siempre podés recurrir a la lavandina. Ahora, si las tazas son de plástico, usá un estropajo metálico o de alambre.
El truco para que no se acumulen estas tediosas manchas es que laves la taza con agua caliente apenas después de utilizarla. De esta manera, evitarás que el café o té desgaste la capa que protege las tazas.