Esta técnica busca liberar la mente y organizar tus pensamientos a través de la escritura.
Journaling: la tendencia de escribir para despejar la mente
El journaling es una práctica cada vez más popular que puede transformar la manera en que organizamos nuestros pensamientos y emociones.
Fundamentalmente consiste en volcar en un cuaderno todos los sentimientos, deseos y preocupaciones que invadan nuestra mente en situaciones de crisis.
En este sentido, sitios especializados afirman que aplicando de manera correcta la práctica del journaling, lograremos gestionar el estrés, como así también, aumentar la claridad mental y hasta mejorar nuestra salud emocional.
Aspectos centrales del journaling
En caso de sentirnos abrumados por nuestros propios pensamientos, despejar y liberar nuestra mente de preocupaciones persistentes no es una tarea sencilla.
En este sentido, el journaling ayuda a poner en papel lo que nos pasa por la cabeza, permitiendo que todos los pensamientos dejen de ser rumiantes en nuestro interior. Además, no se trata solo de escribir, los especialistas argumentan que también se puede rellenar las paginas con dibujos, fotos y todo lo que nos inspire y relaje.
Los beneficios del journaling son muchos: al escribir, podemos procesar nuestras emociones de manera más efectiva, tomar decisiones más conscientes, desahogarnos sin filtros y obtener una visión más clara sobre lo que realmente queremos. Además, nos ayuda a reducir la ansiedad y nos ofrece un alivio mental en tiempos de estrés.
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La técnica del journaling fue popularizada por Ryder Carroll, un diseñador austríaco que, después de años de buscar una forma divertida de organizarse, creó un método ágil conocido como "rapid blogging". Una de las principales características de esta práctica es su flexibilidad ya que con apenas unos minutos al día, es posible incorporarla a nuestra rutina diaria en cualquier momento que tengamos la necesidad.
Es un espacio completamente personal e íntimo, ideal para plasmar metas, reflexiones o simplemente liberar tensiones. Si bien es posible hacerlo de manera individual, también es positivo consultarlo y realizarlo con el acompañamiento de un profesional de la salud mental.
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