Cuántas veces han escuchado la frase "no sé hacer ni un huevo frito". Bien, no es tan difícil como pueden hacerlo parecer. Sólo es cuestión de práctica.
Cuatro formas de cocinar huevos para principiantes
Siempre decimos: cualquiera puede hacer un huevo frito o escuchamos a alguien decir "no sé hacer ni un huevo frito". Pero todo es posible, nada es tan difícil, sólo es cuestión de práctica y el único que sabe el punto justo es el cocinero y el que lo disfruta cuando lo hace.
Aquí, varios secretos para que distintas cocciones de huevos queden perfectas o casi, hasta agarrarle la mano. De lo más simple y conocido, hasta lo que nunca hacemos.
Duros: Sabemos que es fácil, pero aunque no lo crean la cocción del huevo duro tiene sus minutos exactos. Son 10 ó 12 desde que el agua empieza a hervir. Y te damos un truquito extra: para que no se rompan al golpearse entre ellos durante el hervor, agregá al agua un chorrito de vinagre. Para pelarlos, dejalos enfriar a temperatura ambiente. Pero si estás muy apurado/a ponelos bajo el chorro de agua fría un ratito. Si se te pasan de cocción quedan oscuros alrededor de la yema, o cuesta más descascararlos.
Poché: Hay que llenar la mitad de una cacerolita o jarro con agua y agregar un pocillo (tamaño café) con vinagre. Poner al fuego y cuando rompa el hervor cascar un huevo y cocinarlo de 2 a 3 minutos en el líquido. Retirarlo con una espumadera para sacar el excedente de agua.
Mollet (pasado por agua): El huevo se cocina con su cáscara durante 5 ó 6 minutos desde que hierve el agua. Se sacan del fuego e inmediatamente se sumergen en agua fría. Luego se pelan con cuidado, porque su particularidad es que queda la clara cocida y la yema blanda. Es el llamado pasado por agua. Ese que cuando éramos chicos nuestras madres agujeraban por un extremo para que lo comiéramos con una cucharita o con miguitas de pan.
El truco familiar, cuando levanta el hervor: contar hasta 100, para mí es la forma más sencilla y no falla.
Huevos fritos: Lo principal es que los huevos estén a temperatura ambiente, y que no los rompas sobre el aceite. Eso está prohibido. Hay que partirlos antes y dejarlos reposar en un plato hondo. Desde allí, suavemente, van al aceite caliente. Cuando notes que la clara ya no es transparente, están listos y la yema en su punto justo. Nota: los huevos fritos se salan cuando salen de la sartén.
Yemas sobrantes: para que duren 2 ó 3 días en la heladera hay que cubrirlas con un poco de agua fría, para evitar que se forme una película dura.
Y estén atentos, si sumergen el producto en agua y flota, eso significa que no es fresco. Los ideal es que lleguen al fondo. Si queda de punta están al borde.