Quienes lo padecen, dudan de sus logros personales y sufren de un temor persistente a ser descubiertos como un "fraude".
Estrategias para combatir al síndrome del impostor
Si bien es conocido popularmente como "síndrome del impostor", diversos especialistas han manifestado más recientemente que es preferible llamarlo "la experiencia del impostor", ya que en realidad no se trata de ninguna enfermedad.
Este síndrome o experiencia, es una emoción incapacitante que puede afectar a nuestra vida cotidiana y suponer un obstáculo para el desarrollo profesional, además de provocar diversos síntomas como la ansiedad, el insomnio o el estrés crónico.
Las personas que experimentan este síndrome a menudo son incapaces de internalizar sus éxitos, ya que los atribuyen a la suerte o a engañar a otros para que piensen que son más inteligentes. Aunque no es un trastorno diagnóstico en el sentido clínico, el síndrome del impostor puede tener un impacto significativo en nuestra autoestima y bienestar mental.
Si bien esta experiencia puede afectar a cualquier persona, independientemente de su nivel de éxito, área de trabajo o educación, se ha observado que sucede con frecuencia en ambientes académicos y profesionales, donde las personas pueden comparar constantemente su desempeño con el de los demás.
Lo recomendable siempre es consultar a un especialista para recibir un acompañamiento personalizado.
En esta dirección, reconocer y abordar el síndrome del impostor es crucial para promover una imagen propia saludable y permitir que las personas persigan sus objetivos con confianza. Aunque puede ser un desafío superarlo completamente, entender y trabajar en estos sentimientos puede llevar a un mayor bienestar emocional. En este sentido, lo mejor siempre será consultar a un especialista para recibir un acompañamiento personalizado.
Características del Síndrome del Impostor
- Dudas sobre la capacidad propia y desvalorización del desempeño personal.
- Atribución de éxitos a factores externos como la suerte o la ayuda de otros, en lugar de habilidades propias.
- Temor a no cumplir con las expectativas y ser expuesto como un fraude.
- Procrastinación o sobre preparación como mecanismos para prevenir el fracaso.
Estrategias de Manejo
- Trabajar el autoconocimiento de los propios logros y aceptación de elogios.
- Conversar las dudas y los sentimientos de fraude con personas de confianza o profesionales de la salud mental.
- Aceptar que el error y el aprendizaje son parte del proceso de desarrollo personal y profesional.
- Practicar técnicas de manejo del estrés y la ansiedad, como la meditación, ejercicios de respiración o terapia.
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