¿Mientras más grande mejor? En esta nota de aclaramos qué te conviene más para tu hogar.
El tamaño de la pantalla del televisor sí importa
Algo necesario a la hora de comprar un televisor es determinar de qué tamaño lo querés. Pero esto depende de varios factores como el ambiente de la casa donde se instalará.
Una pantalla más grande te brinda una experiencia de visualización más inmersiva, pero como señala iProfesional, se debe buscar un equilibrio entre la tendencia a ir más grande con una comprensión de cómo eso afecta la distancia ideal para sentarse, los beneficios de las diferentes resoluciones y la comodidad de la experiencia de visualización.
Las reglas generales para los televisores 1080p más antiguos no son las mismas que para los televisores 4K actuales. Los televisores 4K de 65 pulgadas ya son el promedio y los más grandes de 75 a 85 pulgadas se vuelven más accesibles.
Por lo tanto, averiguar dónde colocar tu nuevo televisor se convierte en un desafío. Encontrar el tamaño correcto de televisor es una tarea que requiere responder ciertos interrogantes sobre la resolución ideal, a qué distancia del televisor mejor, y si realmente quieres una pantalla más grande.
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Los televisores de hoy ofrecen tres opciones de resolución: 1080p, 4K y 8K. Se recomienda 4K para casi todos. Sin embargo, la resolución cambiará dependiendo de cuán cerca puedas sentarte a un televisor y qué tan caro será.
Calculá el tamaño y la posición de la habitación. Las habitaciones no se hacen más amplias para acomodar equipos más grandes, así que buscá el tamaño adecuado para tu espacio.
Cuanto mayor sea la resolución, más cerca podrás sentarte antes de notar la pixelación en una imagen. Eso significa que podés sentarte más cerca de un televisor 4K (3840 x 2160) que de un televisor de 1080p.
Hay otra cuestión: una cosa es configurar el televisor con el soporte incluido y otra si usás un soporte de pared para colgarlo. El uso del soporte incluido para colocar el televisor sobre una mesa acercará al equipo al espectador y acortará la distancia de visualización.
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Colocar al equipo en la pared puede agregar una distancia pequeña a la medida visible, lo que puede ser la diferencia entre un televisor de 60 pulgadas y un modelo de 72 pulgadas.
Según el tipo de soporte que usés y el grosor del televisor, tu pantalla se ubicará a unas pocas pulgadas de la pared, pero los detalles variarán de un modelo a otro. Por ejemplo: el televisor OLED LG G1 está diseñados para montarse a ras de la pared, pero la mayoría aún necesitará algo de espacio para acomodar el equipo de montaje.
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