Esta afección se suma a diferentes síntomas que se producen después de haber contraído Coronavirus.
El efluvio telógeno, un nuevo síntoma de Ómicron que puede durar 9 meses
Las secuelas a largo plazo de la enfermedad por coronavirus (COVID-19) han sido poco estudiadas, pero son de gran interés social. Entre estas se encuentran síntomas como disnea, fatiga, tos y disosmia.
Por otra parte, la variante Ómicron puede dejar secuelas como el efluvio telógeno (ET), puede empezar a manifestarse en el curso de los últimos días de enfermedad y puede tener una duración de hasta 9 meses.
La Academia Estadounidense de Dermatología (AAD), descubrió la anomalía a través de estudios efectuados a pacientes que han contraído Ómicron en los últimos meses.
El efluvio telógeno se hace visible pasado algunos días de haber contraído el virus, sin embargo tiene mas posibilidades de presentarse en el final de la enfermedad.
¿Qué es el efluvio telógeno?
Esta afección aguda es una alopecia no cicatrizal, la cual se caracterizada por la caída difusa del pelo, inicia a los 2-3 meses en un episodio desencadenante.
La caída del pelo es el resultado de un estímulo que detiene de manera repentina la fase de crecimiento de los folículos pilosos (anágena) dando paso a las fases de involución (catágeno) y de reposo del folículo (telógeno).
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Dentro de las causas desencadenantes se han descrito estrés emocional, condiciones médicas crónicas, alteraciones nutricionales y medicamentos y estados febriles, los investigadores detallaron que esta secuela no es algo exclusivo de Ómicron, sino que puede aparecer, por ejemplo, cuando el paciente tiene fiebre alta.
Por otro lado, se ha reportado caída del pelo en aproximadamente el 20% de los pacientes que han pasado la COVID-19, la cual posiblemente es atribuible.
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