Para interiores y exteriores de tu hogar, un procedimiento sencillo hasta para el más inexperto.
Cómo cultivar un limonero desde una semilla
Especialistas en jardinería aseguran que el cultivo de un limonero no reviste dificultad y que es un proceso sencillo, incluso para personas que no tienen experiencia en el área.
Si bien es un procedimiento a mediano plazo, cuando ya tiene un tamaño considerable y hasta da sus frutos, tiene un encanto inigualable, además de que el hecho de presenciar su crecimiento y avances es un privilegio.
Sus hojas verdes, que contrastan con sus flores blancas, y el aroma refrescante inconfundible que emana en toda época del año, este árbol cautiva los sentidos y se posiciona entre los preferidos del jardín, aunque como mencionamos, puede también colocarse en interiores.
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Según MinutoAr, el primer paso consiste en agarrar un limón, partirlo a la mitad y extraer varias semillas o una cantidad considerable para germinar. Limpiarlas con abundante agua y dejar que se sequen por más o menos 15 minutos.
Con una pinza de depilar tenés que retirar la capa externa que cubre a la pepa, cuando estén todas listas se colocan en una maceta, si se le puede agregar humus de lombriz a la tierra será mejor.
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Es importante regarlas, taparlas con una servilleta y dejarlas en un ambiente cálido de la casa. Cada tres días se controla la humedad para que el sustrato no esté seco por mucho tiempo. En dos semanas tendrás los primeros brotes, siempre y cuando se protejan del sol extremo y el viento.
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