Estas son las aptitudes y los aprendizajes que hay que tener en cuenta para llevar adelante un proyecto.
Las claves que hay que tener en cuenta a la hora de emprender
Algunos de los emprendedores más exitosos del país apuntan a que estas son algunas de las aptitudes y los aprendizajes que hay que tener en cuenta para llevar adelante un proyecto propio.
1) Pasión, creatividad y responsabilidad
"Creo que sin estas características es difícil empezar un proyecto", afirma Marina Mendez, una de las emprendedoras más exitosas del país en lo que tiene que ver con cursos de marroquinería.
Como dice el refrán, "del dicho al hecho hay un trecho" y pasar de la palabra a la acción implica apasionarse por lo uno hace y ser creativo a la hora de planear el proyecto, para que sea auténtico y distinguible del resto. Y luego, es necesaria la constancia.
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2) Perderle el miedo al "fracaso"
El fracaso en un emprendedor es parte del aprendizaje y hay que aprender a perderle el miedo. Así fue cómo lo vivió Marina: "A lo largo de todo el camino que recorrí, fracasé tantas veces como las que acerté". Lo importante es poder identificar esos fracasos para revertirlos y actuar coherentemente.
3) Las metas cambian
La mayoría de las veces, los objetivos van mutando. Comenzamos con algo más simple y a medida que vamos avanzando va cambiando. Lo importante es tener metas definidas, aunque sean difíciles de alcanzar, y trabajar diariamente por eso.
4) Filtrar los consejos
Hay que estar muy atentos a los consejos que recibimos y poder distinguir de quién provienen y con qué intención.
"Debemos aprender a filtrar los consejos; si vienen de alguien que sabe y nos aconseja desde la bondad hacia nuestro negocio, ahí está bueno escuchar", explicó la emprendedora.
5) Conocer las herramientas digitales
Todas las que herramientas digitales que sean posibles y estén a nuestro alcance, mejor. Hoy todo es virtual y cualquier curso que hagamos o aplicación que aprendamos, va a sumar.
6) Ser consciente de los obstáculos
Los obstáculos personales que pueden llegar a surgir son la falta de ambición (en otras palabras, no pensar en la imagen completa), no saber delegar o trabajar en equipo y la inconstancia. Pero, también, a eso se pueden sumar la inestabilidad de precios y los problemas económicos que se pueden suscitar.
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