La causa más común de la alopecia se debe a una cuestión hereditaria que ocurre con el envejecimiento.
Caída del cabello: causas, tratamientos y cómo prevenirla
La pérdida anormal de cabello, conocida como alopecia es una enfermedad que afecta principalmente a hombres, aunque las mujeres también pueden padecerlo.
Hay personas que prefieren no tratar ni ocultar la calvicie. Otras optan con taparla con peinados, maquillaje, sombreros e incluso existen quienes eligen opciones disponibles para prevenir una mayor caída del pelo o restaurar el crecimiento. A continuación, causas, tratamientos y cómo prevenir la caída de cabello.
Causas
Las personas suelen perder de 50 a 100 hebras de cabello al día, según Mayo Clinic, esto regularmente no se percibe porque el pelo crece nuevamente al mismo tiempo. El problema comienza cuando la cabellera caída no es reemplazada.
La causa más común es debido a una cuestión hereditaria que ocurre con el envejecimiento, esto suele llamarse alopecia androgénica. Generalmente aparace progresivamente.
Además, existen otros trastornos que pueden ocasionar la pérdida temporal o permanente del cabello, como los cambios hormonales del embarazo, trabajo de parto, la menospausia y problemas de tiroides.
También está la alopecia areata, relacionada con el sistema inmunitario y causa la pérdida desigual del pelo. De igual manera, existe afecciones del cuero cabelludo como la tiña y el trastorno tricotilomanía que consiste en arrancarse compulsivamente el cabello.
Cabe mencionar que otra causa puede ser el efecto secundario de algunos medicamentos, como los utilizados para tratar el cáncer, la artritis, la depresión, los problemas cardíacos, la gota y la presión arterial alta. Muchas personas notan una reducción general del grosor del cabello meses después de tener un choque físico o emocional. Este tipo de pérdida del cabello es temporal.
Prevención
La mayoría de los casos de alopecia son causados por motivos genéticos y no tienen alguna forma de prevenirse. Sin embargo, existen varios tips para evitar la pérdida de cabello.
Usar un desenredante, evita tirones al cepillar y peinar el cabello, especialmente si está mojado, se puede utilizar un peine de dientes anchos para evitar los tirones. También se debe tratar de no someter el cuero cabelludo a tratamientos fuertes, como los rizadores calientes y las planchas para el cabello y no usar bandas elásticas, hebillas o trenzas para peinarlo.
Proteger el cabello de la luz del sol y de otras fuentes de luz ultravioleta, también dejar de fumar, ya que existen estudios que han demostrado una relación entre el tabaquismo y la calvicie.
En caso de estar sometido a un tratamiento con quimioterapia, consultar con el médico sobre un gorro de frío ya que reducen el riesgo de que se pierda el cabello durante el procedimiento.
Tratamientos
Hay tratamientos eficaces para la pérdida del cabello que incluyen medicamentos y cirugía. Si la caída del mismo es consecuencia de una enfermedad preexistente, será necesario el tratamiento para esa enfermedad. Si un determinado medicamento está causando la caída del cabello, el médico puede aconsejarte que dejes de usarlo durante unos meses.
Entre los medicamentos que existen para revertir la pérdida del cabello está el minoxidil, el cual es de venta libre y viene en forma de líquido, espuma y champú. Se aplica en el cuero cabelludo una vez al día para las mujeres y dos veces al día para los hombres. El minoxidil favorece el crecimiento del cabello o disminuyen el índice de caída en muchas personas. Se necesitan al menos seis meses de tratamiento para ver los efectos.
Otro medicamento es el finasteride, el cual tiene que ser recetado. Es una pastilla que se toma diariamente y que evita la caída del cabello y en algunos casos a aumenta el crecimiento. De igual manera, puede llevar unos meses saber si te está funcionando. Los efectos secundarios son la disminución del deseo y la función sexual, así como el aumento del riesgo de presentar cáncer de próstata.
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Si la pérdida permanente de cabello, solo se afecta la parte superior de la cabeza, un trasplante de cabello o una cirugía de restauración capilar pueden ayudar. Durante este procedimiento, se extrae cabello de una parte de la cabeza que tiene pelo y lo trasplanta a una zona calva. No requiere hospitalización, pero es doloroso, por lo que te administrarán un sedante para aliviar las molestias.
Los efectos secundarios de esta cirugía incluyen sangrado, moretonres, hinchazón e infección y es posible que necesites más de una intervención quirúrgica para obtener el efecto deseado, además, con el tiempo, la pérdida de cabello hereditaria continuará avanzando.
La última opción es el uso de un dispostivo láser bajo nivel, en algunos estudios se ha demostrado que mejora la densidad del cabello, sin embargo, no han sido demostrados los efectos a largo plazo.
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