Cabellos teñidos: cómo pasar el verano y sobrevivir en el intento

 Ya les vengo anticipando que esta temporada es la que más daño hace a sus cabellos.

Y hay algo en particular que todas las personas que se tiñen notan: que su color se pone rojo, naranja o amarillo.

En esta nota te cuento por qué ocurre esto y cómo evitarlo.

1. Si te teñís es porque usas una coloración cosmética por oxidación

Sí, ya el nombre técnico te lo dice todo. Tu cabello y sus pigmentos naturales se mezclan con los artificiales en un proceso de oxidación. Por lo que lo mínimo que necesitás son productos antioxidantes, claramente.

2. Usar shampoo con un sulfato gentil es indispensable

Mientras más lave tu shampoo y más abrasivo sea el sulfato, más espuma y detergente va a tener, por lo que más rápido van a aparecer estos reflejos indeseados.

Ver: Arena y sol, el mar azul... y todo lo que tu cabello necesita

3. Filtro UV

No me voy a cansar de decirlo: al igual que tu piel, tu cabello necesita protegerse. Desde una gorra, pañuelo, hasta productos con protección y filtro son indispensables.

4. Agua

Obvio que todo agua cambia el color de tu cabello. Lo aclara, opaca y deslava según a dónde vayas. Lo que podes hacer es lavar tu cabello con agua tibia/fría, y si lo vas a hacer diariamente, que sea suave, una sola vez y con un buen shampoo.

Leer: ¡Por fin! Vuelven las capas

5. Evitar sacarlo o peinarlo

Un alisado saludable, un bótox, una máscara semanal. Un buen óleo y multibeneficio son las claves de un cabello saludable.

Si ya llegaste tarde a esta nota y tu cabello está destruido, te aconsejo un tratamiento de larga duración: tipo células madres. Hacete un diagnóstico y descubrí con un profesional qué es lo que realmente necesitás. ¡Nos leemos la semana que viene!