Preparar porciones individuales no tiene por qué ser complicado. Descubrí ideas de platos fáciles y sabrosos para disfrutar en casa sin complicarte.
Las 3 recetas sencillas y prácticas para quienes viven solos
Cocinar para una sola persona puede parecer una misión imposible, pero es una práctica cada vez más común en un mundo donde casi un tercio de los hogares son unipersonales, según datos de Naciones Unidas.
Muchas veces, quienes viven solos prefieren no complicarse en la cocina y optan por la comida rápida, preelaborada e incluso el delivery. Sin embargo, preparar porciones individuales no tiene que ser complicado ni aburrido.
Con ingredientes básicos y un poco de creatividad, es posible disfrutar de platos sabrosos, económicos y adaptados a tus gustos.
Además, expertos en el tema remarcan que el aprender a cocinar para uno mismo tiene múltiples beneficios ya que no solo permite ahorrar y evitar el desperdicio de alimentos, sino que también brinda la oportunidad de experimentar con diferentes ingredientes y sabores sin preocuparse por grandes cantidades.
Es también, una forma de cuidar la salud ya que se puede tener un mayor control sobre los ingredientes y las porciones, adaptando las comidas a las necesidades y preferencias nutricionales de cada uno sin dejar de lado el sabor.
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3 recetas de platos para una sola persona:
1. Tortilla de verduras rápida: Con un huevo, algunas verduras como pimiento, espinaca y champiñones, y una pizca de queso rallado, podés preparar una tortilla deliciosa y saludable en minutos. Simplemente tenes que mezclar los ingredientes, verter la mezcla en una sartén y cocinarla hasta que esté dorada.
2. Tazón de avena con frutas: Para un desayuno nutritivo, cocinar una porción de avena en leche o agua, y añadir frutas frescas como banana, frutillas o arándanos y la completas con una cucharada de frutos secos para un extra de energía.
3. Ensalada de quinoa y pollo: Cocinar un poco de quinoa y agregarle unos trozos de pechuga de pollo a la plancha, junto con vegetales frescos como tomate, pepino y zanahoria. Aliñar con aceite de oliva y jugo de limón para un plato completo y balanceado.