El psicólogo Flavio Calvo analizó el perfil psicológico de la actriz y reveló datos sorprendentes.
Especialista asegura que la China Suárez "seduce por adicción"
La actriz Eugenia "China" Suárez ha sido blanco de reiteradas críticas en las últimas semanas tras ser tildada como la tercera en discordia entre el futbolista Mauro Icardi y su esposa Wanda Nara que atravesaron una profunda crisis por rumores de infidelidad.
Pese a que Eugenia es una mujer que no mantiene compromisos desde que se separó del padre de sus hijos más pequeños, Benjamín Vicuña, fue blanco de numerosas críticas y recibió múltiples desvalorizaciones y hasta fue catalogada como "roba maridos". Esta descalificación fue relacionada con sus relaciones amorosas del pasado.
Pero, además, en los últimos días y luego del affaire con Icardi, se vinculó a la China Suárez con el actor Nico Furtado y el empresario español Armando Mena Navareño. Situación que llevó a un análisis psicológico de algunos especialistas.
La actriz Eugenia China Suarez ha sido blanco de reiteradas críticas en las últimas semanas.
Específicamente se trata del doctor en psicología Flavio Calvo, M.N. 66.869, docente, tallerista y autor, quien analiza la situación, el perfil psicológico y plantea la necesidad de seducir como si fuera una adicción.
Ver: Wanda Nara confirmó que se separó de Icardi
La palabra del psicólogo
El doctor en psicología Flavio Calvo, apunta a que desde pequeños se aprende sobre la aceptación y en el proceso de desarrollo, muchas personas van desenvolviendo la necesidad de agradar, como una necesidad y como que si se necesite del mismo para subsistir.
En este sentido, Calvo, específica en la revista Para Ti que esta situación llevada al extremo implica que si no estamos agradando a otros, no tiene valor y que esto se puede extrapolar al campo de la seducción. De esta manera, seducir constantemente y la necesidad de ser aceptado, se convierten en fundamentales para la construcción de la autoestima.
Pero, esta situación puede agravarse y el problema se presenta cuando las personas tienen conductas de seducción que suelen no ser aprobadas, lo que puede generar mayor necesidad de aprobación. Así es que Calvo asegura que esto se puede convertir en una bola de nieve creciente de seducción, complacer, falsa autoestima, sentimientos de inferioridad y necesidad de seducir nuevamente.
Un psicólogo plantea la necesidad de seducir como si fuera una adicción.
Sumado a ello, la sociedad actual se rige por patrones de competencia constante y cada vez es mayor la necesidad por agradar y gustar a los demás; de hecho, hay personas que no soportan que otros no puedan quererlas.
La adicción de seducir
Este psicólogo también apunta a que existe la necesidad de seducir como una especie de adicción, y que esto se puede comprender debido a que en está en juego la actividad dopaminérgica cerebral.
La necesidad de seducir pone en en juego la actividad dopaminérgica cerebral.
Vale mencionar que la dopamina es un neurotransmisor relacionado con la búsqueda de la satisfacción y el refuerzo de esta búsqueda. El organismo la segrega cuando se activa en nuestro cerebro el área de la búsqueda de placer.
En este caso, si alguien se vuelve adicto a un tipo de conductas tendrá cada vez una mayor dependencia física y psicológica y cada vez necesitará una dosis mayor de esas conductas para sentirse complacido. En este sentido el tratamiento psicológico es fundamental para superar estas conductas y buscar llenar esos vacíos emocionales que esas acciones tapan.
Si alguien se vuelve adicto a este tipo de conductas tendrá cada vez una mayor dependencia física y psicológica.
Ver: La frase de Icardi a la China Suárez que hizo enfurecer a Wanda Nara
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