Omar Félix: "Se excedieron con las tarifas"

- ¿Quién es Omar Félix?

- Es difícil explicarlo aquí, al haber desarrollado la mayor parte de mi vida política en San Rafael. Siempre digo que tenemos distintos medios… Distinto Código Procesal, es decir, una justicia diferente… ¡Hasta otro obispo! Sé que para mí, ha sido una desventaja desde el “conocimiento”. Pero soy un ciudadano mendocino que abrazó la política desde muy chico. Agarrado de los pantalones de mi padre, que cada dos por tres estaba “en cana”. Por suerte, ahora hay otra situación. La política es mi pasión. Siempre preocupado por la provincia, por el país.

- ¿Cristina “sí”, o Cristina “no”?

- La política necesita que no haya proscripciones. Los ciudadanos eligen. Pero el Justicialismo, y lo decía Perón, debe evolucionar con el tiempo. Rescato muchas políticas del kirchnerismo. La AUH, el ingreso de más de tres millones de personas a las jubilaciones… que de otro modo no se habrían jubilado nunca. El desendeudamiento… La recuperación de YPF y Aerolíneas…como puedo ser crítico de muchas otras cosas. Pero creo que estamos en otra época, se debe rescatar lo bueno y mejorarlo, y ser crítico y dejar de lado lo que se pudo haber hecho mal…

- Elegante manera de decir “Cristina, ahora no…”

- Creo que puede aportar mucho, por algo tiene el reconocimiento de muchos argentinos, como el rechazo de muchos otros.

- ¿No les sucede que van a los barrios y les preguntan por Cristina?

- Sí, y también vamos a otros donde la ex presidenta tiene un rechazo importante. Las experiencias del pasado son valiosas, en la medida que aprendamos.

- El gobierno tiene medido que el ítem aula es la medida de más apoyo, la más popular que ha tomado… Y que puso a los docentes en el aula. Si fuese gobernador… ¿Qué haría?

- Creo que es necesario tener un sistema de control, no sólo del docente sino de todos los trabajadores del Estado. Como si fuese una empresa privada. Se puede empezar a controlar con un sistema, pero luego hay dignificar a los trabajadores. Para que vayan tomando conciencia del rol de cada uno, con responsabilidad y eficiencia.

- Imposible. Somos argentinos. La dirigencia que perdió las elecciones del SUTE se fueron pidiendo al gobierno hasta 70 días de vacaciones…

- Pero se puede… Yo puedo compartir mi experiencia, cuando me tocó conducir el municipio de San Rafael. Prioricé mucho el trabajo para que el empleado municipal se sintiera bien, digno, se valorase a sí mismo. En una Navidad, esperábamos las doce de la noche y cayó una manga de piedra que destruyó San Rafael. Salí por las radios convocando a los empleados y cayeron en masa a trabajar. Algunos, con los hijos… porque estaban todos en familia. Lo importante es hacer que el hombre se valore a sí mismo, y será mejor su trabajo. El docente debe sentir que lo valoramos y que es importante para la sociedad. El Estado debe cuidar a su gente.

- Dijo que no se debe proscribir a nadie… ¿Qué opina respecto de la reelección para los gobernadores de Mendoza? La pregunta tiene un lado “B”: ¿Qué opina de que Cornejo tenga una chance de reelección?

- Esto requiere una reforma de la Constitución, que ha sido manoseada desde el retorno de la democracia. Hay que encarar una reforma profunda de todos los institutos que deban modificarse. Incorporar otros… donde no esté mezclado con la reelección del gobernador. Porque siempre existe la sospecha de las intenciones de perpetuarse en el poder. Tal vez haya que encarar una reforma, y luego, simplemente una enmienda con la sola modificación que permita reelegir a un gobernador. Creo que el gobierno, el gobernador, equivocó el camino… el proyecto de reforma que vimos no era bueno. Siempre será muy difícil para el que gobierna, intentar una reforma de la Constitución de Mendoza con reelección. Porque la sospecha del “reeleccionismo” siempre está, y subyace ese sentimiento de que el que lo propone, es la única solución para la provincia. Y a los mendocinos no nos gustan las actitudes mesiánicas.

- ¿Eso es un mensaje para Cornejo?

- Si él lo quiere tomar así, puede ser.

- Si llega al Congreso, se va a topar con discusiones pesadas: probables reforma laboral, impositiva, previsional… ¿Tiene opinión formada sobre estos temas?

- Vamos a tener que discutir todo. La ley de coparticipación debe ser modificada para corregir los desequilibrios entre las provincias. El esquema impositivo debe ser modificado. Tenemos un costo de producción de todo, muy importante. Estas son deudas pendientes de la política. Lo mismo con la ley financiera, que está vigente desde la época de Martínez de Hoz. La reforma laboral de Brasil, por ejemplo, va a contrapelo de lo que pasa en el mundo desarrollado, donde se trata de que los trabajadores trabajen menos y produzcan más, con resultados óptimos. Es distinto a obligar al trabajador a trabajar más, y que sea la única variable del costo de producción. Respecto de la reforma previsional, es todavía peor. He escuchado barbaridades de legisladores del PRO…

- Pero países con muchas políticas “dirigistas”, muy intervencionistas, debieron hacer reformas previsionales porque las “cajas” no dan, no alcanzan para mantener a los pasivos así como está el sistema.

- Seguro. Pero son países con una ecuación distinta a la nuestra. Bajo índice de natalidad, por ejemplo. Acá, los hombres se jubilan a los 65 y las mujeres a los 60, como regla general. La edad promedio de vida de los hombres en Argentina es de 73 años. Y de 76 en las mujeres. Si subimos cinco años la edad jubilatoria, a la gente le va a quedar muy poco para descansar y disfrutar de la vida. Y finalmente, está la situación de la Anses, que pudo incorporar tres millones de jubilados, solventar el Procrear, el Progresar, la AUH, tres millones de nuevos jubilados con dos aumentos al año, y no se desfinanció. Y la Anses no se desfinanció. Lo que pasa, es que puede haber alguien que quiera volver al negocio, con un sistema mixto y nuevas AFJP.

- ¿Cuál es la principal idea que se lleva al Congreso, si llega?

- Hay muchos temas coyunturales que requieren legislación. El precio del boleto es uno, porque hay un desequilibrio entre lo que cuesta en Buenos Aires y Gran Buenos Aires, y lo que cuesta en Mendoza, donde es más caro. Esto es porque los subsidios que da el gobierno nacional quedan en Buenos Aires. Es una injusticia, todos somos argentinos con los mismos derechos. Si lo repartieran de modo equitativo, sería mejor y el boleto sería más barato en Mendoza. También hay que encarar de otro modo las tarifas.

- Pero el gobierno de Cristina ha hecho desastres con las tarifas

- Hubo cosas bien, y otras mal. El atraso tarifario era una realidad. Pero no pueden implementarlo así, se excedieron con las tarifas… No se pueden aumentar servicios básicos y de primera necesidad… como la luz o el gas sin tener en cuenta la capacidad adquisitiva de la población. Había que corregir tarifas, pero es excesivo. Creo que lo que pasa con el gas, tiene mucho que ver con que el ministro del área, Juan José Aranguren, viene de una empresa petrolera. Se suben las tarifas, se sube el costo de vida y se baja el poder adquisitivo de la gente. Repercute en los que menos tienen y favorecen a otros sectores. No tiene lógica. Benefician a los exportadores de granos quitando retenciones y dándoles diez años para retener sus certificados, y que especulen en qué momento hay una devaluación para cambiarlos, no tiene sentido. Produce más déficit fiscal y un endeudamiento que ya es insostenible, cien mil millones de dólares en un año y medio. La dictadura, nefasta, 30.000 desaparecidos… pasó de 6.000 millones de dólares a 45.000… y ahora en un año y medio, casi cien mil millones de dólares, y casi un billón de pesos en letras “lebacs” sin impuestos, ni puestos de trabajo. La única “lluvia de inversiones” ocurrió en las finanzas, especulativa.

- ¿Qué opina del gobierno de Cornejo?

- No ha dado las respuestas que la sociedad esperaba. Cuando Cornejo asumió teníamos una situación muy difícil, de arrastre, de varias gestiones. Y en Mendoza el sector privado no ha crecido, como para sostener con sus impuestos a esta provincia. El gobierno no puede dar respuesta y Cornejo empieza a enojarse, cuando le dicen que tiene ciudades en el ranking nacional de la inseguridad, reacciona mal cuando un joven señala algo en el acto de la AMIA, se enoja con el sector vitivinícola cuando aparece el rumor de un impuesto al alcohol… “sabemos quiénes son…” dice. Quien gobierna debe escuchar con serenidad a la población. Antes que enojarse, debe escuchar qué le están diciendo. Hay tareas que no se están haciendo. Y no es por falta de recursos o de herramientas, por ejemplo en Seguridad. Le hemos dado el endeudamiento que ningún gobernador mendocino ha tenido… incluso hay una ley autoría de mi hermano, para que todos los vehículos que entran y salen de la provincia puedan ser requisados. Pero resulta que ahora vemos cómo en los grandes casos de narcotráfico… la droga pasó por Mendoza. Es evidente que algo pasa. Por otro lado… ¿qué pasa con la defensa de la economía regional? Es una cachetada al orgullo mendocino. Cuando sobra vino… el Estado se los tiene que comprar… y cuando falta… ¿No conseguimos que le mejoren el precio a los productores, y les permitimos importar?

- ¿Existe la unidad del peronismo?

- ¿Por qué no? Después de las elecciones del 13, seguro. Somos los únicos que vamos a definir la interna con el mejor método, como decía Alfonsín, con más democracia.