"El Pulga" ya es el candidato firme de los intendentes. Empieza a mostrar sus cartas ante un electorado deprimido. En qué está pensando.
Bermejo: "Las crisis de 1989 y 2001 no están lejos"
Alejandro Bermejo es un tipo inquieto. Por eso desde Maipú se popularizó como "el Pulga", y tal como su hermano mayor Adolfo, con mucho arraigo con el departamento bodeguero.
Tiene 56 años y transmite desde su espacio como intendente de Maipú, una sensación de alguien que se sale de su cuerpo.
Sus colaboradores lo ven "caminado por las paredes" ("como siempre", dicen) pero ahora que es precandidato a gobernador del peronismo lo notan más decidido a emprender sus pensamientos políticos. Como buscando una síntesis de sí mismo.
Por ejemplo, ratifica que es un convencido de que hay que renovar la estructura política. Un criterio compartido con el sector kirchnerista de La Cámpora que lidera la senadora nacional Anabel Fernández Sagasti, la joven precandidata a gobernadora también del PJ.
Esta entrevista se concretó en el salón municipal contiguo a su despacho mientras esperaba a Adolfo el otro Bermejo, el principal consejero del ahora postulante a la gobernación.
Se lo percibe como un hombre energizante con el gesto amable y que siente el desafío de demostrar que la política es una tarea digna y no sólo para "vivos".
Mucho se especuló a su alrededor sobre su meneada y postergada candidatura, parecía que todos la dirigencia de su sector quería que fuera él y el más dubitativo, era el mismo Bermejo.
"Me siento entusiasmado para asumir la responsabilidad", afirma dándose ánimo.
Le toca una época no apta para salir y ganar la confianza de los votantes empobrecidos e impactados por el choque de la crisis económica.
Por ese sendero transitó este diálogo político con el Post. Ahí está el aspirante, encorsetado por las carencias sociales y condicionado por el 32 por ciento de pobres que hay en el país o peor, si se tiene en cuenta que la mitad de la población infantil del país menos de 14 años es pobre. Veamos qué dice.
- ¿En este contexto de crisis económica, en qué hará hincapié para que los mendocinos le presten atención?
- La situación de Mendoza es compleja. Araviesa una crisis económica productiva muy fuerte debido a la crisis económica nacional. Esto genera una crisis social creciente y nos enteramos del incremento de siete puntos de la pobreza que es doloroso. Por eso quien utilice este tema para hacer campaña será injusto y una falta de respeto a la gente que la está pasando mal.
- Los índices no acompañan para ninguna propuesta propositiva, los pronósticos no anticipan mejora...
- No veo que sea fácil mejorar las condiciones de vida de los argentinos y los mendocinos, porque todos los indicadores son negativos como los de pobreza y desempleo junto a las caídas de las economías ,y dentro de ellas la caída de la construcción. Además de la inflación galopante que no la pueden dominar. La especulación con el dólar que incrementa el costo de la canasta que ya está en los 25 mil pesos y la canasta alimentaria que está en los 9800 pesos. Y si le sumamos las altas tasas de interés que privan a las pymes de tomar créditos, entonces concluimos que la economía está paralizada y Mendoza está estancada.
- Mendoza está estancada porque forma parte de una economía regional que sufre el ajuste , me parece...
- Sólo tres sectores fueron los beneficiados con este panorama: el financiero, el energético y el agroexportador. Está claro que con esto no alcanza y los indicadores dicen eso.
- Ese es el contexto nacional que condiciona a cualquier provincia argentina ¿Qué hay que hacer?
- Hay un proceso en lo nacional donde esto se rediscutirá, por lo que hay que ser optimista, en este esquema se está planteando de formar un consejo socio económico entre los representantes de la sociedad para encontrar una salida y me parece adecuado para el momento.
- El jueves en la presentación de Rodolfo Gabrielli se planteó la necesidad de diálogo amplio entre los sectores, y le confieso que ver a la oposición reunida fue preocupante porque no solo lo bueno une, el espanto también une.
- (Sonríe) Trasladándolo a Mendoza me parece que nadie tiene la potestad individual para resolver el problema. Hay que buscar acuerdos y consensos para rediscutir y repensar la Mendoza que viene. Esto lo digo desde la humildad como precandidato, que deberíamos tener todos. Desde lo personal voy a tener en cuenta esto: escuchar y acordar con otros sectores sociales económicos y políticos.
- ¿Qué propone?
- Los representantes partidarios tendríamos que ser capaces de sentarnos sin egoísmos electorales, sin pensar en lo inmediato y sin especular con lo que está pasando, porque eso hace que se agrande. Más gente en el medio sin poder resolver sus problemas. Se hace necesaria una convocatoria en el marco de las propuestas que serían después de las PASO. Hay que establecer cinco o seis puntos en común que tiene que ver con el desarrollo y crecimiento de Mendoza.
- ¿Con esa mirada qué hizo Alfredo Cornejo?
- Creo que Cornejo ha tenido un diferencial positivo en algunas políticas públicas como es el orden fiscal y las mejoras en el ámbito judicial. El equilibrio fiscal y el orden administrativo es el "abc" y es lo que hacemos aquí (en Maipú) desde hace muchos años.
- Un municipio no es la Provincia...
- Claro, trasladar esto al contexto provincial que es mucho más grande y hay que tener en cuenta otros "diferenciales" con pautas presupuestarias acordes. Pero confío plenamente en el entusiasmo que tengo para trabajar en un plano más abierto, plural y no sólo desde lo sectorial o el amiguismo. Tenemos que buscar a los mejores hombres y mujeres y profesionalizar algunas áreas de la administración pública provincial, para dar pasos acertados en esta época de crisis.
- Eso parece razonable para este tiempo de búsqueda de soluciones novedosas, pero la política económica no da margen a los estados provinciales.
- Uno de los puntos em que se ve impactada la provincia, es en la baja de recaudación. Y eso tiene que ver con la venta y el consumo. Ingresos Brutos con las ventas ,y el IVA con el consumo. Esto es a causa de los desequilibrios económicos nacionales. Pero estoy convencido de que tenemos que ser capaces de crecer y desarrollarnos independientemente de lo nacional.
Lógicamente las grandes crisis como las de 1989 y 2001 se llevan por delante la institucionalidad y las posibilidades de desarrollo de cualquier país ,y no está lejos de que ocurra porque no aciertan con la variable económica. Pero en el caso de Mendoza debemos tener la capacidad para atender nuestras demandas y en base a nuestros intereses. Provincias cercanas como San Juan, Córdoba, La Pampa o Neuquén lo han logrado. El proyecto petrolero Vaca Muerta con más de 25 mil millones de dólares de inversión es la prueba .
Sumario del precandidato
Bermejo siguió planteando escenarios políticos y económicos promisorios y emergentes en la charla. Como si fuera un cocinero pródigo de platos para consumir en el mismo momento.
1- Dijo que ha seguido con atención las críticas de su colega juninense, el radical Mario Abed (precandidato a vicegobernador oficialista), hacia la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR) por considerar a esta organización mixta empresarial y estatal, culpable de la crisis del sector vitivinícola. "Si es necesario hay que organizar un comité donde estén todos y en especial los productores que son los más perjudicados en esto, coincido con Abed que hay que abordarlo", remarcó.
2- Dijo que su dirigente preferido para gobernar el país es el actual gobernador sanjuanino Sergio Uñac aunque reconoce a la figura de Roberto Lavagna, que aglutina mucha opinión de propios y ajenos.
3- Dijo coincidir con muchos dirigentes sobre la potencialidad que tiene Mendoza de convertirse en una "fábrica de conocimiento" y pone como ejemplo una escuela financiada entre Maipú y el sector privado para potenciar talentos de niños de la ruralidad.
4- Dijo estar dispuesto a desarrollar la minería por zonas o regiones. Entiende que el Valle de Uco o departamentos como General Alvear hayan definido otra matriz productiva rechazando la minería. Pero también reconoce que quedaron truncos proyectos como San Jorge en Las Heras o que Malargüe tiene un perfil minero-petrolero.
5- De su acción estratégica electoral no habla, pero sí lo comentan sus colaboradores directos: quiere una fórmula de unidad peronista con Bermejo-Fernández Sagasti. Encargó para este fin de semana una encuesta para conocer cómo mide ese binomio. También reconocen que tiene mucha empatía con el "protector" José Luis Ramón y que han hablado de armar un frente electoral, aunque las aspiraciones personales de cada uno ha enfriado un poco esas tratativas.
...
(Nota del redactor) Cómo lo vi: Después de una hora de conversar con Bermejo sobre "la Mendoza estancada" y de imaginar "la Mendoza que viene" me fui del salón maipucino pensando que los votantes tendremos que "remar en el dulce de leche" para definir esta elección en un país con depresión. Estamos más para el psicólogo que para las urnas.