Es una de las empresas más importantes de la región, con control mayoritario del Estado.
YPF, historia y actualidad
Yacimientos Petrolíferos Fiscales SA, habitualmente nombrado por su sigla YPF, es una empresa argentina mixta, con el 51% de las acciones a manos del Estado argentino y el 49% cotiza en la bolsa de Buenos Aires. Está dedicada a la industria petrolera y energética.
Las primeras décadas de YPF
YPF fue creada por el Estado, mediante el decreto el 3 de junio de 1922, bajo la presidencia de Hipólito Yrigoyen. Se concretó la empresa estatal luego de varias obras dedicadas a la extracción de petróleo en el país. Meses después, con Marcelo Torcuato de Alvear como presidente, Enrique Mosconi fue nombrado director, convirtiéndose en una pieza fundamental para el desarrollo de la industria.
Tanto Yrigoyen como Mosconi encausaron a YPF para que tenga el monopolio legal del petróleo. Arturo Frondizi sentó su política petrolera en mantener el monopolio, nacionalizar el petróleo y tener autoabastecimiento, que la empresa aún era incapaz de lograrlo en 1958 y fue necesario recurrir a capitales extranjeros para lograr el autoabastecimiento por primera vez en cincuenta años. Arturo Illia disolvió los contratos realizados con compañías petroleras extranjeras. Durante la dictadura de Juan Carlos Onganía, YPF dejó de tener el monopolio y se dieron concesiones petroleras a otras empresas.
Privatización y estatización
Durante la presidencia de Carlos Menem la empresa se privatizó: pasó de ser una sociedad del estado a una sociedad anónima. En 1993 el 46% de las acciones eran del sector privado, el Estado sólo tenía 20% y las provincias 12%. Cinco años después, los privados poseían casi 75% de las acciones pero Argentina tenía "la acción de oro", una acción nominal que permite "vencer" a todas las otras acciones y/o accionistas en una votación bajo ciertas circunstancias.
En 1999 la privatización se terminó de concretar con la venta a Repsol de la compra de un 14,99%, convirtiéndose así en la octava productora de petróleo y la decimoquinta compañía energética de todo el planeta.
En 2011 el Grupo Petersen de Enrique Eskenazi tenía el 25,46% de las acciones, Repsol el 57,43%, el 17,09% en inversores privados flotando en bolsa y el Estado un 0,02% pero con la acción de oro.
En abril de 2012 la presidenta Cristina Fernández de Kirchner presentó el proyecto de estatización de YPF, aunque seguía siendo una sociedad anónima. Esta acción, que se concretó, aún hoy está judicializado por privados y hay una sentencia internacional en contra de Argentina por u$s 16.100 millones.
Actualidad
Luego de la estatización, el Estado cuenta con el 51% de las acciones y el 49% cotiza en la bolsa de Buenos Aires. De ese 51% estatal, el 51% le corresponde a Nación y el 49% a las provincias.
Es una de las empresas más importantes de la región y ha sido catalogada en los últimos años por Forbes como la número 136 en todo el mundo. Emplea, de forma directa o indirecta, a unas 100.000 personas en Argentina.
Se encarga a la exploración, explotación, destilación, distribución y producción petróleo y derivados de los hidrocarburos, pero con el correr de los años también se involucró en estas actividades con la energía eléctrica y el gas. Además se encarga de la venta de combustibles y lubricantes, así como también de otros productos como fertilizantes, plásticos y bienes y servicios relacionados con la industria.
En su proyecto de Ley Ómnibus en el inicio de su mandato, el presidente Javier Milei incluyó a YPF como una de las empresas para ser privatizada pero el arco político pidió que no sea incluida pasar a manos privadas.