Tras resucitar el domingo pasado, el bitcoin no subió a los cielos

BTC cierra agosto como su peor mes de 2024.

Tras resucitar el domingo pasado, el bitcoin no subió a los cielos

Hace 7 días Bitcoin resucitó entre los muertos, pero finalmente, no subió a los cielos. Por el contrario, perdió casi un 10% y hoy arrancó septiembre cotizando un 25% más barato que su último máximo histórico de marzo.

No fue claramente un "to the moon". Poco duró el entusiasmo y el frenesí del domingo pasado por la noticia de que la FED (Reserva Federal de los Estados Unidos) reducirá próximamente la tasa de interés, lo que beneficiaría a BTC y empujaría su precio hacia arriba.

Al parecer, cuando los inversores sacaron cuentas de que la reducción de la tasa norteamericana no sería tan fuerte (0,5 puntos), sino más bien moderada (0,25 puntos), se les terminó el optimismo e hicieron caja, a pesar de que la FED resolverá en septiembre si baja la tasa de interés y en cuanto.

Esta es la principal causa que argumentan los "especialistas" en el criptomundo para explicar por qué el domingo pasado bitcoin llegó a cotizar a U$S65.000 y 48 horas después se derrumbó hasta los 58K, perdiendo un 10%. Desde allí, el precio osciló en tramos cortos, no logrando nunca volver a los 60K.

Pero, además, se pueden inferir otras causas. Bitcoin lleva 27 semanas consecutivas cotizando en el rango más alto de su historia, algo nunca visto. En seis meses el precio osciló entre los U$S55.000 y los U$S70.000, marcando la punta más baja en los 49K, lo que ocurrió recientemente, y la más alta en los 73,7K, máximo histórico que registró hace ya tiempo, el 14 de marzo pasado.

Para dimensionarlo, hay que entender que los máximos históricos anteriores a este rango fueron en el año 2021, cuando marcó U$S64.000 en la primera mitad del año y U$S69.000 en la segunda mitad. Nunca más BTC volvió a esos precios y menos a esos rangos, hasta hace seis meses, cuando luego del último máximo, ha cotizado en la franja de entre los 60K y 70 como si fuera completamente normal.

Probablemente sea la nueva normalidad de bitcoin, luego de que los inversores institucionales ingresaran al negocio a través de los fondos de inversión en bitcoins, conocidos como ETF.

Pero el dato central de los últimos 6 meses es que a BTC le ha sido imposible volver a superar esa vara. Cada vez que llegó cerca de los U$S70.000 los vendedores superaron a los compradores y el precio bajó.

Con 27 semanas sin poder superar el techo de un rango de cotización altísimo y bastante estable, los traders se deben estar preguntando si bitcoin no está caro y quizá necesite caer más para volverse muy atractivo, disparando una nueva carrera de compras.

Porque de lo contrario, para apuntar a los U$S80.000, BTC necesita más nafta para despegar y hoy por hoy es una incógnita que la tasa de interés de la FED vaya a ser ese combustible, aunque ya empezaron a correr los pronósticos de un septiembre jubiloso una vez que la FED hable. Dependerá de si la reducción es fuerte o no, y veremos.

Por otro lado, bitcoin llevaba cuatro meses consecutivos con su cotización en una línea descendente muy leve hasta que, en el quinto mes, en agosto se cayó de verdad. Tras el máximo de 73,7K de marzo, en abril alcanzó los 72,7K, en mayo los 71,9K, en junio 71,9K y en julio 70K. En agosto, en cambio, marcó un máximo mucho menor, de U$S65.000 y también marcó el mínimo más bajo en siete meses. Septiembre arranca por debajo de los 60K.

Otro dato interesante es que la cotización de bitcoin volvió a quedar por debajo del precio promedio de 200 días, el que había superado la semana pasada, y como la caída fue brusca, también quedó por debajo del precio promedio de 50 días y del de 20 días.

Esto induce a pensar que si la cotización de hoy está por debajo de todos esos precios promedios esta podría resultar atractiva, pero cuando BTC cae por debajo del precio promedio de 200 días, el mercado lo toma como una señal bajista y espera a ver que sucede antes de salir a comprar masivamente.

En resumidas cuentas, aunque parezca deprimido, bitcoin ostenta un gran precio cotizando hoy a U$S58.000 por unidad. Nunca cotizó en ese precio antes del 2021, año en el que conquistó esos valores temporalmente, y tampoco nunca consiguió volver a los 58K en 2022 y 2023. Ni siquiera a 50K pudo llegar en esos dos años. En seis meses nos hemos mal acostumbrado y hasta parece poco. ¿Será la nueva normalidad?

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