La provincia cuenta con fondos suficientes para el futuro desarrollo económico, que generará riqueza y fuentes de trabajo para impedir el éxodo de nuestros habitantes.
Mendoza, la locomotora de Cuyo
Los 1023 millones de dólares, en épocas de vacas flacas, son un tesoro que debemos aprovechar para seguir potenciando a Mendoza y que vuelva a ser el motor de la región después de tantos años que fue perjudicada.
Con buen tino, el Gobernador aceleró las negociaciones con el gobierno nacional para que los fondos por el resarcimiento por los perjuicios de la Promoción Industrial, se puedan aplicar a diversos proyectos para toda la provincia.
La necesidad de invertir para generar más divisas, mejorarle la calidad de vida a los mendocinos y darles expectativas con visión de futuro, es el objetivo que persigue la administración de nuestro gobierno que no le cierra las puertas a nadie y abre el abanico para que cada departamento, pueda presentar proyectos para seguir creciendo.
Franco Ambrosini, autor del texto.
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En realidad, toda la provincia se vio afectada por los efectos de la Promoción Industrial que generó asimetrías fiscales e impositivas en la región de Cuyo. Productores, pymes que no pudieron migrar, comerciantes y profesionales se vieron perjudicados por la caída en la actividad económica, y ahora tenemos la oportunidad de transformar la realidad.
Portezuelo se cayó por el laudo presidencial en contra y la decisión de varias provincias que forman parte del COIRCO, que no le permitieron a Mendoza avanzar en la obra del siglo.
Hay tiempo para planificar, escuchar y estudiar cada proyecto y así lo propuso el gobernador que podría a dedo elegir las obras que se van a realizar.
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En ese contexto, Alfredo Cornejo sinceró la discusión y abrió democráticamente el debate al anunciarlo en la Legislatura, a pesar de algunos enojos que están más relacionados con el egoísmo partidario.
Mendoza no puede perder más oportunidades para empezar a crecer. Hay que concretar los sueños emprendedores que tenemos los mendocinos para el presente y el futuro, y es hora de ponerse a trabajar en aquellos proyectos que van a priorizar el desarrollo de toda la provincia para que se vuelva a transformar en la Locomotora de Cuyo.
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