La impericia del Gobierno y la "casta", como define Milei a sus detractores, condicionaron las finanzas de su gestión. Cuatro puntos positivos y cuatro negativos de la semana que terminó.
Lo bueno y lo malo de la semana económica: la "casta" en contra de Milei
Termina una semana en la que el presidente Javier Milei estuvo muy atento a lo que ocurría en el Congreso, donde se definió el destino de fondos públicos con suerte dispar para el Gobierno: logró ratificar el veto a la nueva ley de movilidad jubilatoria, pero no pudo evitar que se apruebe la ley de financiamiento universitario, lo que pondría en riesgo el superávit fiscal.
Pero más allá de estos debates públicos que tuvieron alcance masivo, hubo algunos aspectos económicos, positivos y negativos, que pasaron desapercibidos o no repercutieron de la misma manera que la reforma jubilatoria o el presupuesto universitario.
Lo mejor de la semana
1- La producción industrial creció. Se trata de un indicador que no paraba de caer desde hace más de 18 meses. Ahora, subió un 6,9% mensual y, por primera vez en esta gestión, la producción industrial se recupera en serio (desde niveles muy bajos, pero se recupera). ¿Una luz al final del túnel? Es muy posible. De todas maneras, habrá que esperar más datos que lo confirmen en lo que resta del año.
2- Los mercados financieros están tranquilos. El dólar blue y los dólares financieros siguen oscilando a la baja. De todas maneras, no hay que perder de vista que el Gobierno interviene en el mercado vendiendo reservas con su nueva política de emisión cero, lo que genera algo de preocupación. ¿Será el mejor uso de las escasas reservas del BCRA?
3- Se refinancia la deuda en pesos del Tesoro. Un tema menos impactante, pero muy importante. En septiembre, el peor mes de vencimientos de la deuda en pesos del Tesoro Nacional, nada menos que 21 billones de pesos (21 seguido de doce ceros), las licitaciones del Gobierno para colocar nuevas letras y pagar las que vencen fueron exitosas. Se pudo hacer normalmente el roll over de esa deuda y se espera que ocurra lo mismo en lo que resta del mes.
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4- La política, un rato a favor. Más allá de la opinión sobre el bajo haber jubilatorio y el sistema desquiciado que tiene el país (1 aportante por cada jubilado cuando deberían ser 4), Milei pudo sortear el momento más difícil de su gobierno al evitar la insistencia de la cámara que hubiera anulado su veto a la ley de movilidad jubilatoria. Si la oposición obtenía los dos tercios de los votos, no sólo golpeaba fuerte al Gobierno en el superávit fiscal, sino que lo debilitaba políticamente. Los dos tercios en contra dejarían al presidente a tiro de otras leyes anti superávit o, peor aún, de un "juicio político" por el resto de su mandato.
Lo peor de la semana
1- La inflación de agosto. Los servicios crecieron el doble que los alimentos (excepto en Mendoza por una diferencia metodológica) y el promedio dio un poco mas de un 4% mensual. No se consolida una tendencia fuerte a la baja. En la medida que no baje la inflación, el Gobierno tendrá problemas más serios frente a una opinión pública que sufre el ajuste, a la espera -precisamente- de este resultado clave.
2- El dólar oficial es cada vez más barato. Hay muchas evidencias de que el dólar oficial está barato y se ratificará este verano con la salida de argentinos al exterior y la merma en la cantidad de visitantes foráneos. Una tentación que han tenido todos los gobiernos, desde Cristina hasta Macri, para contener artificialmente la inflación. Sin estar todavía a niveles tan bajos como el final de la convertibilidad, ya es claro que este dólar oficial va a dañar la rentabilidad de los exportadores y ya está dañando claramente al turismo que llega del exterior. Si la inflación sigue en torno al 4% mensual y dólar sube solamente el 2%, como anunció el gobierno y como ha sido hasta ahora, llegaremos a fin de año con valor del dólar oficial más barato aún en términos reales. Una luz de alerta para 2025.
3- Las reservas del BCRA negativas y en baja. Desde mayo, el Banco Central viene perdiendo reservas a pesar de que las importaciones están planchadas por la recesión y que continúa el cepo. No hay dólares en el BCRA para afrontar sus obligaciones. Será muy importante seguir el resultado de la primera etapa del blanqueo y las negociaciones con el FMI, ahora que corrieron al "enemigo" de Milei, para ver si pueden engrosar las reservas del BCRA.
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4- La política en contra. Más allá de la "victoria" de Milei al ratificarse el veto a la ley de movilidad jubilatoria, esta semana tuvo sanción una ley de financiamiento universitario que daña directamente al superávit fiscal e indexa el gasto bimestralmente. ¿Se ha generado una nueva mayoría que incluye no sólo al kirchnerismo, sino a parte del radicalismo y el PRO? Aprovechando la impericia política y violencia del presidente y su entorno, reaparecen los rasgos demagógicos de gran parte de la dirigencia política argentina. A nueve meses de la asunción de Milei, parece un apresuramiento irresponsable. Siempre las razones para aumentar el gasto sin definir claramente de dónde sale la plata son, en la superficie, causas nobles. ¿Y en el fondo?
A tener en cuenta
Este domingo, Milei presentará ante el Congreso su Presupuesto para el 2025, año de elecciones en el que se jugará su futuro político y el de su gobierno. Seguramente, deberá establecer una regla para ajustar partidas presupuestarias en la medida que lo obliguen a aumentar gastos o que la recaudación sea menor a la pronosticada. Por otro lado, también tendrá que mantener el compromiso de bajar impuestos si la recaudación supera lo previsto.