El economista liberal, precandidato a presidente de la Nación, presentó su plataforma electoral con controvertidas reformas y con la promesa de eliminar la inflación como bandera. La mirada de dos economistas de Mendoza.
Las propuestas económicas de Milei si llega a presidente, ¿son viables?
El diputado nacional por La Libertad Avanza, Javier Milei, es una de las personalidades políticas del momento, debido a la cercanía de las elecciones presidenciales, que lo tendrán como uno de los contendientes en la carrera por reemplazar al gobierno de Alberto Fernández.
Su controvertida propuesta, que incluye fuertes conceptos e ideas, como la dolarización de la economía, la reducción del aparato del Estado, reformas impositivas y laborales, además de eliminación gradual de la asistencia social, en favor de la libertad de mercado, marcan grandes puntos de discordia en el arco político nacional.
Hace pocas semanas, en el Foro Económico de Llao Llao, que se realizó en el hotel de Bariloche, donde se reunieron los principales empresarios y referentes políticos del país, en una especie de debate para exponer ideas y tratar de captar voluntades, en medio de la búsqueda de apoyo político, Milei expuso su plan económico, que realizará en caso de llegar a la Casa Rosada.
La propuesta económica del actual Diputado, se denomina "Motosierra". Es un plan económico de tres generaciones de medidas, para "llegar a ser potencia en 35 años".
Este plan se compone de dos ejes fundamentales: la dolarización de la economía y la drástica disminución del aparato estatal.
Mendoza Post dialogó con dos economistas de Mendoza, José Vargas y Carina Farah, para analizar los principales conceptos de Milei.
La dolarización, palabra que despierta todo tipo de pasiones, es una de los caballos de batalla del Diputado libertario. Sin embargo, ¿es posible realizarla en nuestro país?
El economista José Vargas, señala que "desde el punto de vista político y económico es imposible la dolarización", y agrega que "primero hay que equilibrar las cuentas públicas. Hay que ordenar la economía, hay que hacer una serie de reformas, y en última instancia, de ser necesario, por ahí dolarizar. Sin embargo, no creo que sea la solución a todos nuestros problemas".
Por su parte, Carina Farah coincidió en que hoy no están las condiciones para dolarizar, porque "no tenemos reserevas en el Banco Central para dolarizar. Hacerlo en este momento, traería una profundización de la recesión y de los problemas económicos que tenemos, y, por lo tanto, un problema social muy complejo".
Además, Farah recordó: "La Argentina ya tuvo algo muy cercano a la dolarización que fue la Convertibilidad, que se pudo sostener mientras hubo dólares suficientes. La idea era tener más o menos 1 dólar por peso circulante. Tuvimos que salir abruptamente, lo que desató la crisis del 2001, porque nos quedamos sin reservas".
Vargas comentó que si se diera una dolarización abrupta, de la noche a la mañana "sería totalmente perjudicial, empobrecería de una manera considerable a cualquier asalariado y afectaría a los sectores de menores ingresos". "Para que se dé el cambio de moneda, tiene que haber un proceso largo. Es una palabra fuerte, porque por ahí la gente cree que todos los problemas se solucionarían solamente con el cambio de moneda, pero no es así", comentó el especialista.
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Otro de los bastiones del discurso económico libertario de Javier Milei es la eliminación del Banco Central de la República Argentina, porque según el Diputado, es una institución servil al poder de turno y su eliminación haría lo mismo con la inflación, dado que se dejaría de emitir.
Sobre esta posible eliminación, José Vargas señaló que "Milei lo que propone es una serie de reformas, como eliminar el Banco Central. Ahí no coincido con Milei, porque el Banco Central tiene una función de prestamista de última instancia y, además, es un ente regulador. Si actuara como organismo totalmente independiente y cumple su función, sería sumamente beneficioso. Eliminarlo, considero que traería más costos que beneficios", analizó.
Como primera medida para bajar la inflación, Vargas aseguró que lo primero que necesitaría un nuevo gobierno es "tener confianza y credibilidad. A partir de ahí, necesita un plan de estabilización".
Farah fue un poco más allá y señaló que "Milei tiene una visión monetarista de la inflación. Cree que la inflación es por exceso de emisión monetaria. Creo que los procesos inflacionarios arrancan por inflación monetaria. Pero después, los mecanismos de propagación, lo que se conoce como inercia inflacionaria, se da por muchos otros factores. Una de las medidas de los monetaristas, es restringir la oferta monetaria, mediante la suba de la tasa de interés y nosotros ya estamos en el 97% y la inflación no baja".
Por último, respecto al achicamiento del Estado, ambos economistas coinciden en que es de difícil aplicación. Para Vargas, "es fácil decir que voy a achicar el Estado mediante la baja de jubilaciones, venta de empresas estatales, etc. Se achicaría el gasto público, pero tendría un costo social y político muy alto, que no resistiría ningún gobierno", sentenció.
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Carina Farah, cree, además, que "achicar el Estado, sobre todo en una situación social que vive la Argentina, es perjudicar al que menos tiene. Ningún país desarrollado ha encarado los procesos utilizando las teorías liberales que dice Milei. Lo que propone es demodé. El mundo debate sobre la redistribución de la riqueza".
José Vargas, por último, señaló, respecto a la propuesta de reforma laboral que busca Milei: "Es necesaria, pero en este contexto es imposible. El país necesita lograr una reforma que logre mayores niveles salariales y productividad de trabajadores. Pero una reforma para despedir trabajadores y achicar salarios, no tiene sentido".
Así es el Plan "Motosierra" de Milei
Medidas de primera generación:
- Fuerte recorte del gasto público del Estado y una reforma tributaria que empuje una baja de impuestos.
- Eliminación total de la Obra Pública para pasar a un sistema de iniciativa privada.
- Flexibilización del mercado laboral para facilitar la creación de empleo en el sector privado.
- Apertura unilateral al comercio internacional.
- Reforma financiera para imponer una banca libre desregulada junto a la libre competencia de divisas.
Medidas de segunda generación:
- Reforma previsional para recortar el gasto del Estado en jubilaciones y pensiones, uno de los ítems que más empuja el déficit fiscal
- Programa de retiro voluntario de empleados públicos para achicar el Estado.
- Reducción del número de ministerios a ocho.
- Eliminar de forma progresiva los planes sociales a medida que los beneficiarios consigan otros ingresos con trabajos en el sector privado
- Liquidación del BCRA, estableciendo un sistema similar a la banca Simons, con encajes al 100% para depósitos a la vista.
Medidas de tercera generación:
- Reforma profunda del sistema de salud con impulso del sistema privado y competitividad libre entre las empresas del sector
- Reforma del sistema educativo
- Aplicación de un sistema de seguridad "no invasivo" para la población
- Eliminación de la coparticipación hacia las provincias.