Reducirlas para aprovechar el metal deja mucho mayor ganancia y las monedas ahora sirven para dar pequeños vueltos que no alcanzan para prácticamente nada.
Inflación: por qué salen a fundir las monedas de menor valor
La inflación en la Argentina se puede ver muy bien ilustrada en la vida de las monedas actuales. Desde los bancos avisan que no se distribuyen más desde el BCRA las bimetálicas de centro dorado y anillo plateado de $1 ni las de $2 que invierten colores. La aleación de estas monedas ha hecho que la fundación sea más tentadora que el mismo valor a nivel pesos.
Hoy el sistema de monedas es un dolor de cabeza. Las de menos de $1 dejaron de emitirse entre 2013 y 2014 y es casi imposible encontrarlas. Las otras de antiguo diseña todavía están a la vista, aunque no se distribuyen casi para evitar que sean fundidas por los reductores. Éstas últimas fueron cambiadas por la línea "Arboles"de 1, 2, 5 y 10 pesos, que son de acero, más livianas y menos valiosas.
El problema no termina ahí, para el Estado es un gran dolor de cabeza trasladarlas, para que los bancos y las empresas que las usan. Estos costos son aún más onerosos si se considera para lo poco que sirven: solo dar vueltos.
En los bancos manifestan que hay monedas de sobra y el BCRA entrega toda la cantidad que le piden. El problema es que nadie las pide. De hecho, la cantidad de monedas nuevas incorporadas a la circulación en el último año fue muy limitada. En el caso de las de 1 peso, el stock creció solo el 4 por ciento.
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"Pedimos al Banco Central lo mínimo indispensable, porque una sucursal no puede funcionar sin un mínimo de monedas para hacer algunos pagos, como las jubilaciones. Por eso los bancos públicos necesitan más, porque pagan más a jubilados y planes sociales. Pero no dejan de ser un problema: trasladarlas es costoso y nos quita recursos para el transporte de billetes, que es indispensable", indicaron al diario Infobae.
En algunas cabezas del sistema financiero rondan ideas de crear un "vuelto electrónico", enmarcado en la enorme variedad de medios digitales de pagos surgida en los últimos años. Otros piensan en más exigencias para redondear los precios de cualquier bien o servicio, de manera de reducir las chances de que alguien pueda reclamar su vuelto en monedas de 1 o 2 pesos.
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