Do Kwon: el joven que compró 30 mil Bitcoin y se subió al podio cripto

La tendencia bajista que inició Bitcoin el 9 de noviembre pasado, cuando alcanzó los U$S 69.000 estaría a punto de quedar atrás. Todo dependerá de lo que refleje su cotización esta semana en medio de las súper compras realizadas por un gran jugador del mercado, las que habrían sido decisivas para elevar su precio en los últimos 10 días.

La adquisición masiva de 30.727 Bitcoin por parte de Do Kwon, @stablekwon, el joven creador surcoreano de la stablecoin (moneda estable) Terra (UST) y de la criptomoneda Luna, ha sido de tal magnitud que, de golpe, lo ha colocado en el podio mundial de los poseedores de Btc.

De hecho, no dudó en hacerlo público y presumir orgulloso de ello en Twitter, mostrándose en el nuevo tercer puesto del ranking mundial de poseedores de Btc, que encabeza MicroStrategy, la compañía del estadounidense de Michale Saylor, @saylor, la que ofrece una plataforma on line de asistencia a empresas para negocios inteligentes a partir del big data y la secunda la famosa automotriz de coches eléctricos, Tesla, del multimillonario sudafricano-canadiense Elon Musk, @elonmusk. 

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En entrevistas difundidas por Twitter, Kwon ha anunciado una "nueva era" de Bitcoin, anticipando que planifica seguir comprando Btc hasta reunir una suma equivalente a tres mil millones de dólares, los que usará como reserva de valor y respaldo de su stablecoin UST.

¿Qué es una stablecoin?

Cuando apareció en sus inicios el mercado de criptomonedas, los compradores y vendedores solo podían intercambiar Bitcoin y las pocas cripto que aparecieron luego, por dinero tradicional en efectivo o entre esas mismas criptos. La referencia para todas, en última instancia claro está, era el precio de Btc.

Así fue que no tardó en aparecer la primera criptomoneda estable o stablecoin, creada para cotizar siempre 1 a 1 con el dólar estadounidense con el fin de convertirse en una cripto de intercambio entre el resto de las criptomonedas, sin verse obligados sus dueños a pasar una y otra vez a liquidar en dinero tradicional para vender o comprar.

Por ejemplo, si un comprador de Bitcoin quiere vender sus Btc porque el precio es favorable y a la vez no quiere pasarse a dinero en efectivo o correr el riesgo con otra criptomoneda, cambia sus Bitcoin por una stablecoin y se refugia sin riesgo en esta y a la espera, porque siempre mantiene la paridad con el dólar.

Como los gobiernos no operan en el mundo de las criptomonedas, los creadores de las stablecoins son empresas privadas que ofrecen el servicio y son ellos las que emiten. Esta característica trae un interrogante crucial.

Ver: El Salvador: la Nación que adoptó a Bitcoin como su moneda propia

¿Cómo están respaldadas esas stablecoins? 

Algunas en dólares, bonos estadounidenses, acciones y títulos bursátiles, otras sólo en dólares, otras en el mismo proceso blockchain que regula la emisión a partir de la oferta y la demanda de sus usuarios e incluso hay stablecoins respaldarlas en oro.

En el caso de la stablecoin Terra (UST), la novedad es que su creador, Do Kwon, anunció que las respaldará con los 30 mil Btc que ya compró y con otros 30 mil más que piensa comprar.

Es importante entender que las stablecoin no son dólares digitales, no los emite la Reserva Federal de Estados Unidos ni tienen que ver con el país norteamericano. Son criptomonedas ancladas al dólar.

Por eso Terra se denomina UST: la sigla significa dólares Terra. La más popular de todas sin embargo es Tether cuya sigla es USDT. También está USDC que es de Coinbase, una de las aplicaciones más tradicionales y respetadas que permite comprar y vender criptomonedas. Otras dos muy famosas son DAI, stablecoin que regula su paridad 1 a 1 por oferta y demanda de sus usuarios y BUSD, que es la stablecoin de la casa de cambios Binance. En cambio, hay una que está respaldada por onzas de oro. Es Pax Gold cuya sigla es PAXG.

Como dijimos al principio y lo referimos en la entrega de la semana pasada, Btc venía mostrando en el gráfico de cotizaciones, hace más de 10 días, un aumento progresivo y sostenido de su valor, que se coronó en esta última semana, superando con esfuerzo los U$S 48.000 y perforando con comodidad el techo de los U$S 45.000, contra el que rebotaba hacia abajo desde el 7 de febrero pasado, sin poder perforarlo.

Si bien en las últimas 48 horas Btc cayó nuevamente hasta los 44.500, en una oscilación previsible del precio, la novedad es que, lo que que fuera el techo de su cotización ahora pasó a ser el piso.

Bitcoin, que venía cotizando en un canal paralelo estable, entre los U$S 33.000 y los U$S 45.500 por unidad desde el 20 de enero pasado, comenzó a comercializarse en la última semana entre los U$S 45.000 y los poco más de U$S 48.000.

Desde esa fecha de enero hasta hoy, en medio de la abulia del mercado y la indecisión a la espera del impacto de la guerra en Ucrania, justamente apareció Ho Kwon comprando toneladas de Btc en serie. Y piensa seguir comprando más.

Todo esto hace pensar en una recuperación alcista, no solo por el shock de confianza al tomar la cripto como reserva de valor, sino porque le viene a dar un sacudón de demanda a un mercado que venía dormido.

Además, la guerra con Ucrania y el aumento del precio de las materias primas ha disparado la inflación en Europa y Estados Unidos. Cada vez que hay inflación, las criptomonedas entran en alza porque se transforman en refugio temporal de valor.

A ello, se suma que las métricas de los diferentes índices que anticipan el comportamiento del precio de Bitcoin, muestran una tendencia alcista. El principal dato es el cruce del precio promedio de 20 días (Media Móvil) por encima de la MM de 50 días. Lo cruzó hace 6 días y cuando ello ocurre avisa que hay una tendencia incipiente al alza. Este movimiento podría ser confirmado en las próximas horas cuando el precio promedio de 50 días supere al de 100 días, algo inminente. El otro dato positivo es que el lunes pasado, el precio de Btc tocó la Media Móvil de 200 días, cuando llegó a los U$S 48.000, algo que no ocurría desde el 1 de enero.

Hay que esperar si este escenario se confirma esta semana porque como ya hemos dicho, los precios no los ponen los índices de medición sino los inversores.