Decenas de locales se reinventaron para sobrevivir. Otros cerraron, pero reabrieron con otro rubro. Las ventas online explotaron y otras debieron cambiar de domicilio. Muchos aseguran que fue una oportunidad y que hoy están mejor.
Así se revolucionó el comercio mendocino durante la pandemia
"La pandemia fue una oportunidad", así definieron algunos comerciantes la llegada de las restricciones a causa del virus que cambió millones de vidas. Es que muchos emprendedores mendocinos no bajaron la guardia: se reinventaron en el rubro en la forma de vender y hasta en el lugar de trabajo.
"Donde había un bar ahora quizás hay una tienda de ropa. En donde se vendían zapatillas, quizás ahora hay una casa de viandas. Muchos cambiaron de rubro, otros bajaron la persiana, pero atrás llegó un tercero que la estaba levantando", así lo cuenta al Post Adrián Alin, referente de Cecitys.
Sobre esta resilencia y hasta - se podría decir - "supervivencia", el dueño de una de las franquicias de kioscos "Yes" que trabajó durante la pandemia contó que "el panorama era desolador": "Miraba para afuera del negocio y no se veía absolutamente a nadie en tres cuadras. Cada vez que pasaba una persona me alegraba. Todo fue muy triste".
Sin embargo, el vendedor contó que el panorama cambió de forma radical al pasar los meses: "Me gusta ver el vaso medio lleno y hoy somos felices. La gente comenzó a salir y empezó a comprar. Todo cambió cuando habilitaron el turismo nacional", agregó. Aunque, el emprendedor aseguró que todavía no están a tope: "Esperamos explotar cuando se habilite el turismo extranjero, sobre todo de Chile que viene y compra en cantidad muchos productos de acá".
Hay quienes durante la pandemia se la jugaron a pesar de todas las adversidades y hoy celebran su situación. Un ejemplo de ello es el local Reggi Gelato, sobre la Peatonal, que decidió levantar la persiana de una de sus sucursales en plenas restricciones y en donde antes estaba "Dun Ken", un histórico café mendocino.
Un histórico café cerró para que luego un nuevo comercio
Una de las responsables del local comentó que "fue una jugada fuerte". "Arrancamos cuando ya se podía salir, pero todavía había miedo de hacerlo. Hoy vemos una fuerte reactivación y por suerte se está llenando casi siempre", asegura.
Desde las 8 de la mañana la heladería y cafetería sacando pedidos.
"Sumado a que hoy se permite el aforo al 100% y que consideramos que tenemos algo distinto para ofrecer. Al haber antes otro local similar absorbimos muchos clientes. Tenemos buena pasada y eso también colaboró", remarca la comerciante que es parte de la cadena que ya suma tres sucursales en el Gran Mendoza.
Para cerrar, contó la preocupación que sintieron en el regreso a la Fase 1 en la provincia el pasado 22 de mayo: "La verdad que fue complicado porque no sabíamos cuánto iba a durar. Por suerte terminó siendo corto y en esos días nos turneamos entre todos para trabajar y que todos cobráramos más o menos lo mismo. Primó la solidaridad".
La cadena ya cuenta con tres sucursales.
En otro aspecto, reconoció que se observó una "fuerte reactivación en los últimos meses. Ya que desde que la gente salió, todo comenzó a normalizarse".
Adrián Alín contó cómo cambió el comercio mendocino.
Sobre otro de los métodos que ayudó a la reinvención y las amplias restricciones, Alín destacó que "el take away colaboró para que muchos pudieran seguir trabajando. Otros se movieron a las ventas por Internet y hoy todavía continúan con ese proceso, aunque la mayoría volvió a reactivarse con las compras cara a cara".
Por último, el representante de Cecitys explicó cómo se manejó uno de los principales problemas que sufrieron los comerciantes en Mendoza como fueron los alquileres: "ha primado el consenso y en muchos casos se han pagado los impuestos hasta que se volviera atender para que no cerraran. En otros casos no, pero generalmente la sensatez terminó primando", celebró el comerciante.
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