Un estudio reciente del organismo financiero mostró la relación directa entre ciertas políticas (incluyendo la educativa) y el crecimiento de las exportaciones.
Por qué el FMI puso a Chile como ejemplo de país exportador
Un reciente estudio del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre las relaciones entre las políticas gubernamentales y las exportaciones, puso a Chile como ejemplo de cómo una aplicación de políticas horizontales resulta en una mayor diversificación y ampliación de las exportaciones.
Se trata de cuatro factores que alcanzan a toda la economía: gobierno, educación, infraestructura y política comercial. Todas estas variables influyen directamente en una mayor variedad y complejidad de las exportaciones de todos los países.
Pero el caso de Chile es resaltado pro el FMI porque, a pesar de que es el mayor productor de cobre del mundo, las exportaciones de ese metal son la mitad del conjunto de productos que exportan los chilenos.
Con significativas exportaciones de productos farmacéuticos, tecnología y equipos de telecomunicaciones, la economía trasandina es un "modelo ejemplar en términos de políticas de diversificación", destacó el informe del Fondo.
Al analizar las exportaciones chilenas más allá de las materias primas, el estudio muestra que las políticas que alcanzan a toda la economía, como la gobernanza y la educación, contribuyen a fomentar la diversidad de las exportaciones más que las políticas industriales muy focalizadas. Esas políticas "pueden servir de mejor guía a las naciones que buscan expandir el comercio internacional", aseguraron.
José Vargas: "Estamos a un paso del corralito"
El análisis incluyó 201 países y territorios, pero en vez de limitarse a los índices de complejidad económica tradicionalmente utilizados por los economistas, se centró en estas variables políticas.
Entonces, el personal técnico del FMI propone nuevas maneras de medir la diversidad y la complejidad de las exportaciones nacionales y plantea cómo pueden fomentar esa variedad las políticas que abarcan toda la economía.
Son las que se conocen como "políticas horizontales", porque pueden aplicarse de manera amplia a todo un país, en lugar de centrarse en determinados sectores. El enfoque también tiene en cuenta la proximidad geográfica de una economía a sus socios comerciales y cómo afecta ese factor a las exportaciones, excluidas materias primas como los metales y el petróleo.
Desde esta perspectiva, las autoridades pueden aprender algunas lecciones para poder respaldar mejor un comercio exterior más multifacético, algo que las economías emergentes tienen por objetivo porque está asociado a una menor volatilidad de la producción económica y una aceleración de la expansión a largo plazo. El viejo dicho de "no poner todos los huevos en la misma canasta".
Los técnicos del FMI mostraron un fuerte vínculo entre las exportaciones que no son materias primas y las cuatro variables que pusieron de relieve: gobernanza, educación, infraestructura y apertura del comercio exterior. Mejorar esos ámbitos contribuye directamente en una mayor diversificación porque crean estímulos para exportar bienes complejos y de mayor valor agregado.
El análisis de estas relaciones muestran que la creencia en las políticas industriales destinadas a ciertos sectores no son la mejor manera de ampliar el comercio internacional.
En el caso de Chile, el estudio mostró que su economía es sorprendentemente similar al de Malasia, tanto por su alto nivel de educación como por sus instituciones sólidas. La mayor diferencia es que Malasia se beneficia de la cercanía con los países que le compran como China, Corea y Japón.
Los países de Asia y de Europa que se destacan por su nivel de exportaciones y embarques más diversos y complejos, también lo hacen por sus políticas horizontales más pronunciadas.
Otro de los puntos a tener en cuenta es la necesidad de acortar la distancia geográfica con los consumidores. Para ello, es imprescindible aplicar políticas que mejoren la logística del transporte hacia los puertos, e intentar reducir el tiempo de viaje de los bienes.
Flexibilizar las barreras comerciales y facilitar el comercio, promover la difusión de tecnologías e invertir en tecnologías de comunicaciones que apuntalan la economía digital, como la banda ancha, son otras de las decisiones políticas que ayudan a fortalecer la economía en cuanto a ampliar las exportaciones de un país.
El estudio concluye, además, que un respaldo más focalizado en determinados sectores, como una promoción industrial o incentivos a determinado sector pueden resultar menos eficaces, o incluso perniciosas y que su eficacia tampoco está comprobada a nivel estadístico y multinacional.
A fin de año finaliza el cepo a la exportación de carne en Argentina