El grupo canadiense Couche-Tard, especializado en el rubro gasolinerías, inició conversaciones "amistosas" para comprar la cadena francesa de supermercados.
Carrefour recibió una oferta millonaria para cambiar de dueño
El grupo canadiense Couche-Tard, especializado en el rubro gasolinerías, inició conversaciones "amistosas" para comprar la cadena francesa de supermercados Carrefour, con una oferta de alrededor de US$ 19.720 millones.
La operación, que sorprendió a la firma gala, según fuentes de las compañía consultadas por la agencia AFP, son de carácter "preliminar" e hicieron subir las acciones de Carrefour un 13,4% en la bolsa de París.
Couche-Tard se ha ido expandiendo por Estados Unidos a partir de los años 2000, en el norte de Europa en 2012 y en Asia a finales de 2020.
En base a los números de la empresa dedicada al expendió de combustibles, en 2019 tuvo un beneficio del orden de US$ 2.400 millones.
El grupo canadiense reveló hoy que mandó a Carrefour una propuesta de "alianza amistosa", con un precio de 20 euros por acción, lo que sitúa el valor de la multinacional francesa en torno a los 16.000 millones de euros.
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Carrefour, en un correo interno al que tuvo acceso AFP, dijo que "examinará el proyecto".
Couche-Tard es un grupo con un volumen de negocios de poco más de US$ 54.000 millones según surge del ejercicio anual 2019/2020, enfocado especialmente en el negocio de estaciones de servicio que representan más del 70% de sus ventas, frente al resto de sus operaciones que son las tiendas de pequeño formato.
"Couche-Tard está acostumbrado a ganar tamaño mediante adquisiciones, pero nunca ha emprendido una fusión de esta talla", explicó Clément Genelot, especialista del sector de la distribución de la firma Bryan, Garnier & Co, informó AFP.
Para Couche-Tard, la operación significaría entrar por la puerta grande en el reñido mercado europeo, con una tupida red de tiendas, supermercados e hipermercados.
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Carrefour por su parte cree que la oferta demuestra que su estrategia de convertirse en el líder mundial de la "transición alimentaria" hacia los productos orgánicos, tiene su interés, según los correos internos consultados.
El ministro de Finanzas francés, Bruno Le Maire, se mostró en cambio "a priori no favorable" a una operación de este tipo, porque Carrefour es un "eslabón esencial en la seguridad alimentaria de los franceses", concluyó la agencia AFP.
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