BTC pelea por no perder su precio promedio de los últimos 50 días para evitar una caída más profunda.
Bitcoin vuelve a caer hasta los U$S65.000 sin poder superar su récord
Otra vez sopa. Bitcoin ha vuelto a fracasar en el intento por superar su máximo y reciente récord de cotización sin lograr romper el cielo de los U$S73.777. Al contrario, luego de arañar los 72K el pasado 7 de junio, descendió por un tobogán que en 8 días lo arrastró hasta los U$S65.000.
La inquietud es que BTC frenó por ahora la caída, pero no rebotó, no salió disparado hacia arriba sino que yace aplastado entre los 65K y 66K, habiendo marcado la cotización más baja del último mes.
Bitcoin dejó de hacer pie en su precio promedio de los últimos 20 días, y bajó tanto, que ahora está haciendo equilibrio en su precio promedio de los últimos 50 días. Si cae por debajo de la MM 50 (Media Móvil de 50 días) se abre un panorama incierto que exigirá un seguimiento minuto a minuto.
Lo lógico sería que aumente rápidamente porque los compradores han estado comprando allí, entre 60K y 65K cada vez que BTC ha nadado en esa piscina de precios. Pero, si los compradores huelen sangre y creen que puede bajar más podríamos ver una caída pronunciada.
Ver: Atuel en disputa: qué es el "Tapón de Alonso", la presión "salada" de La Pampa
Una estampida por debajo de los U$S60.000 podría traerle un buen susto al mercado pero también oportunidades, que no vendrían nada mal, porque BTC hace mucho tiempo que cotiza con una gran estabilidad por encima de los 60K.
El mercado se ha armado de paciencia y espera: están los que lo quieren ver volar a U$S 100.000 y los que sueñan con que vuelva a los U$S 40.000 para comprar nuevamente.
Esta oscilación entre los 60K y 70K en algún momento se puede quebrar precipitadamente porque está yendo contra la naturaleza del criptomercado. Los traders e inversores están acostumbrados a hacer ganancias rápidas y abultadas con BTC. Por lo que siempre hay que pensar que algunas ballenas quieran agitar las aguas a coletazos para que el precio se mueva y ellas puedan pescar con su gran boca.
Ver: Los gurkas corporativos resisten y matarán para sobrevivir