Sigue el escándalo en torno al deseo del Xeneize de suspender los próximos dos partidos de la Liga Profesional, tras la eliminación en la Copa Libertadores.
Tinelli, picante, desmintió el comunicado de Boca
El escándalo en torno a Boca Juniors continúa. El Xeneize, tras la vergonzosa eliminación de la Copa Libertadores en manos de Atlético Mineiro, regresó al país con una serie de exigencias caprichosas.
Primero intentó no cumplir con el aislamiento obligatorio que dispusieron desde el Ministerio de Salud de la Nación. Al no lograr esto, desde el club presidido por Jorge Amor Ameal buscaron suspender los próximos dos partidos de la Liga Profesional, contra Banfield (el sábado) y contra San Lorenzo (el próximo martes), pese a que el reglamento aclara que bajo ningún aspecto se puede postergar un encuentro por temas relacionados a la pandemia de Covid, como en este caso, salvo que sea una disposición del Gobierno.
La presión mediática que intentó ejercer Boca fue tan grande, que la institución publicó un comunicado oficial absurdo, en donde aseguraban que Marcelo Tinelli, presidente de la Liga Profesional, había aprobado de forma verbal el pedido de Boca.
Nicolás Russo (presidente de Lanús), Ameal, Tapia y Tinelli.
"Hemos recibido la notificación verbal, por parte del presidente de la Liga, Marcelo Hugo Tinelli, de la suspensión del partido que debíamos disputar ante Banfield el próximo sábado", aseguraba el texto.
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En simultáneo, desde la Liga y la AFA manifestaban que la solicitud del Xeneize era "inviable e improcedente". El punto final llegó de parte del propio Marcelo Tinelli, quien respondió el comunicado en Twitter de forma picante, con un contundente "En fin...".
En consecuencia, todo indica que Boca deberá jugar esos dos partidos con los jugadores que tenga a disposición (la Reserva, más aquellos que no viajaron a Brasil).
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En ese sentido, el equipo de Miguel Ángel Russo deberá jugar frente a el Taladro y el Ciclón con 7 futbolistas de la reserva que no viajaron a jugar por la Copa Libertadores a Belo Horizonte y completar la nómina con otros pibes de divisiones aun menores, además de Edwin Cardona, quien ya terminó su etapa de aislamiento. En ese caso, el entrenador sería Sebastián Battaglia.
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